¿Cuáles son los riesgos de la manicure permanente?
Aunque es una técnica muy utilizada para tener las uñas arregladas, trae consigo algunos riesgos que deberías considerar
Crédito: Shutterstock
Hacerse la manicure es una costumbre que se ha incrementado en los últimos tiempos, sobre todo porque se trata de un asunto estético para muchas mujeres. Sin embargo, las técnicas han ido variando, lo que hace que las uñas se maltraten y se resientan, según un artículo de Expo Beauty Magazine.
Qué es la manicure permanente
Se trata de una técnica donde se usan productos químicos para lograr que el esmalte usado dure más tiempo. En este sentido, los esmaltes de gel, así como el uso de luz ultravioleta hacen que la manicure duren más.
Esta técnica ha cobrado popularidad en los últimos tiempos, ya que no es necesario estar yendo constantemente al manicurista para realizar dicho tratamiento. Sin embargo, existen riesgos de la manicura permanente que podrían ocasionar serios problemas cútaneos.
Riesgos
Cuando se aplica esta técnica de forma seguida, por ejemplo, hacerlo cada 15 días, las uñas se resienten, perdiendo su brillo natural y hasta su grosor. Además, este tipo de tratamientos podrían ocultar problemas en la piel.
El dermatólogo de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York Chris Adigun, citó un único estudio en el que se basaría esta preocupación, justificado por cinco mujeres que presentaron debilidad en sus uñas y los especialistas lo asociaron con la manicure permanente.
La combinación de gel más los rayos ultravioletas afectan la uña; y la acetona también podría ser un factor determinante. Esto se debe a la cantidad de químicos que contienen. Por otro lado, quienes se realizan este tipo de tratamiento de vez en cuando no tienen nada que temer.
Cómo evitar que las uñas se vuelvan frágiles
Existen tratamientos de belleza que no son agresivos. Por eso, lo más recomendable es seguir una técnica de manicure tradicional, que no sea tan fuerte. También es necesario dejar crecer las uñas lo suficiente para evitar que se partan o se debiliten.
Es importante no retirar las cutículas. Esto es muy normal en las técnicas de manicure. Sin embargo, retirarlas aumenta la probabilidad de inflamación y de infecciones. Por último, si existen problemas graves, lo mejor será acudir a un dermatólogo para hacer una mejor evaluación.
