Con cifras positivas alcalde retoma el tema del coronavirus y la reapertura de NYC
De Blasio explica las nuevas normas que se implementarán en el Subway para mantener a los usuarios seguros
Luego de dos días en los cuales la atención del alcalde Bill de Blasio estuvo centrada 100% en la otra crisis que se vive en la Gran Manzana, la de los saqueos y las protestas por la muerte del afroamericano George Floyd en Minneapolis, este miércoles el mandatario volvió a retomar el tema de la Fase 1 de reapertura de la ciudad como parte de la lucha contra el coronavirus.
Aunque De Blasio sí habló sobre el toque de queda y la acción de la Policía el martes en la noche en el segundo día de la aplicación de la medida, este miércoles la rueda de prensa diaria del Alcalde volvió a centrarse en dar los últimos detalles sobre la crisis de salud por el COVID-19. De Blasio explicó que uno de los puntos cruciales para iniciar la reapertura el próximo 8 de junio, será volver a poner en funcionamiento a gran escala el sistema de transporte público masivo.
“El toque de queda también se cumplirá el domingo en la noche y terminará a las cinco de la mañana del lunes, a tiempo para iniciar ese día la reapertura de la ciudad”, explicó el Alcalde, agregando que para ese inicio de actividades, “es fundamental mantener las normas de distanciamiento social en el Subway para que la gente esté segura”.
De Blasio aseguró que ha mantenido conversaciones en los pasados días con el presidente de la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) Pat Foye, y acordaron poner en práctica una serie de reglas. Destacó que la Alcaldía presentó un plan en los que se destacan los siguientes puntos: Volver aumentar la frecuencia del servicio durante las ‘horas pico’ para evitar aglomeraciones en los vagones, colocar estaciones de desinfectantes de manos y hacer obligatorio el uso de mascarillas para lo cual la Ciudad repartirá un millón de tapabocas gratis a los usuarios.
El Alcalde anunció, sin embargo, que esto no era suficiente y por ello están considerando lanzar una campaña de educación con los usuarios y se usará la presencia de personal en las estaciones. Para ello, según explicó, se está analizando crear un equipo de voluntarios que se encargue de promover y reforzar las medidas de distanciamiento social en todo el sistema de transporte.
“Quiero ver que a cualquier lugar que vayas, el tren, autobús o plataforma, hayan personas recordándote o hayan marcadores claros que indiquen dónde se debe estar seguro, incluyendo en las filas para comprar la MetroCard”, indicó el Alcalde, insistiendo que será “crucial que cada otro asiento sea bloqueado, para lograr que haya distancia suficiente con la otra persona. La clave será establecer límites a la capacidad de usuarios en trenes y autobuses”.
Pruebas para todos
Y como parte del proceso de reapertura, el Alcalde anunció que ahora las pruebas de COVID-19 están disponibles para todo el que se las quiera hacer. Cualquiera podrá ir a los centros comunitarios de test donde las están haciendo sin necesidad de cumplir con requisitos como tener algún síntoma.
De Blasio también indicó que ya está casi completo el ‘ejército’ de 2,500 rastreadores de personas posiblemente contagiadas, los cuales serán desplegados en los cinco condados en los próximos días.
Y luego de dos días sin tener noticias sobre el avance en los indicadores que la Ciudad está usando para demostrar que se va en buen camino en la lucha contra la pandemia, y que deben mantener en un nivel positivo por al menos dos semanas, De Blasio dio una muy buena noticia: Por primera vez se bajó el número de personas que se mantienen en las unidades de cuidados intensivos en los 11 hospitales del sistema de salud pública H+H Hospitals, cuya meta es estar por debajo de los 375 pacientes diarios, y que el martes fue de 355.
Sobre los otros dos indicadores, dijo que las nuevas admisiones diarias a hospitales de casos sospechosos de coronavirus, cuyo objetivo es mantenerlo por debajo de las 200 personas cada día, y que el martes fue de 39, mientras que sobre el porcentaje de personas que son diagnosticadas positivas de COVID-19, y que se busca que no sea más de 15%, la cifra fue de solamente 4%.
Estas son cifras alentadoras que se buscan mantener hacia la baja, como parte del inicio de la Fase 1 de reapertura.