¿Cuál es la mejor dieta para combatir la tiroiditis?

Una dieta adecuada puede retrasar o reducir posibles daños causados por la tiroiditis. También es clave en control de los síntomas como el peso corporal, la inflamación, los niveles de colesterol y azúcar

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Foto: Shutterstock Crédito: Shutterstock

En los últimos años se ha reportado un incremento considerable en las enfermedades en la tiroides. Se trata de una de las glándulas más importantes en el organismo humano, tiene forma de mariposa y se encuentra en el cuello justo arriba de la clavícula. Forma parte esencial del sistema endocrino y se encarga de la producción de hormonas endocrinas, que intervienen en numerosas funciones. Es tan importante que regula procesos sencillos como la quema de calorías y cuán rápido late el corazón, en general rige todos los aspectos que componen el metabolismo.

Al ser una glándula sensible es propensa a sufrir diversas alteraciones, entre las que se destacan condiciones como: bocio (agrandamiento de la tiroides), hipertiroidismo, hipotiroidismo, cáncer de tiroides, nódulos y tiroiditis. 

La tiroiditis de Hashimoto también popularmente conocida como la enfermedad de Hashimoto, se posiciona como uno de los padecimientos de tiroides más comunes y recurrentes en Estados Unidos y otros países desarrollados. Lo cierto es que aunque sea tratada con medicamentos, sus síntomas pueden afectar la calidad de vida significativamente. Se trata de una afección crónica que es causada por una reacción del sistema inmunitario contra la glándula tiroides y que a menudo trae como consecuencia la disminución de la función tiroidea. 

Se presenta con síntomas que en un inicio pueden ser difíciles de detectar y confundirse con otros padecimientos como es el caso de la fatiga, piel seca, estreñimiento, dificultad para pensar o concentrarse, menstruaciones irregulares y pérdida de cabello. En casos avanzados se presentan señales más evidentes como bocio o cuello grueso e intolerancia al frío. 

La buena noticia es que se cuenta con diversas investigaciones médicas que demuestran que las modificaciones en la dieta y el estilo de vida, pueden mejorar significativamente los problemas y síntomas que trae consigo dicha enfermedad y de hecho se asocia con grandes bondades para potenciar la calidad de vida. Con base en ello realizar ajustes en la dieta suele ser una de las principales y más fundamentales recomendaciones, seguir una alimentación saludable y personalizada es clave para controlar la inflamación y también reduce el riesgo de padecer enfermedades autoinmunes, colesterol alto y diabetes.

Consejos dietéticos de los expertos:

  • Dietas sin gluten y sin cereales. Muchos estudios indican que las personas con Hashimoto tienen más probabilidades de tener enfermedad celíaca que la población en general. Se cuenta con evidencia que sugiere los inmensos beneficios de seguir una dieta sin gluten y sin granos, para beneficiar la enfermedad de Hashimoto. En un estudio de 6 meses en 34 mujeres con enfermedad de Hashimoto, una dieta sin gluten redujo los niveles de anticuerpos tiroideos lo cual se traduce en una mejor función tiroidea y un aumento en los niveles de vitamina D.
  • Optar por seguir la dieta del protocolo autoinmune (AIP), que se trata de una pauta alimenticia creada por médicos especialistas y diseñada para mejorar el estado de pacientes que padecen enfermedades autoinmunes. Este plan elimina la ingesta de alimentos potencialmente dañinos como los cereales, los lácteos, las solanáceas, el azúcar añadido, el café, las legumbres, los huevos, el alcohol, las nueces, las semillas, los azúcares refinados, los aceites y los aditivos alimentarios. Si bien para algunos puede resultar algo restrictiva, se relaciona con extraordinarios beneficios en el control de la tiroiditis. 
  • Es muy importante considerar evitar los lácteos, los médicos y nutriólogos hacen especial énfasis en este punto. Se cuenta con un estudio que señala sobre una directa relación entre la intolerancia a la lactosa y la enfermedad de Hashimoto, de hecho un estudio realizado en 83 mujeres con enfermedad de Hashimoto, sorprendentemente al 75.9% se le diagnosticó intolerancia a la lactosa. 
  • Centra la dieta en alimentos antiinflamatorios, hoy en día el consumo de ingredientes naturales y de gran potencial terapéutico es una de las principales medidas para mejorar la salud, prevenir enfermedades y perder peso. Optar por estos alimentos es indispensable en el control de la enfermedad tiroiditis, ya que se cree que la inflamación crónica puede ser una de las causas principales de su aparición. Basar la dieta en el consumo de frutas, verduras, especias y pescados grasos, parece ser una fórmula infalible para mejorar.

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