Un año malo (pésimo) pero del que hay que tomar notas
La crisis nos ha dado algunas lecciones para la gestión del dinero
Cerramos 2020, un año malo muy malo en muchos sentidos. Pandemia, recesión, desempleo, deudas y esfuerzos imposibles han estado a la orden del día en el año que acaba.
Es todo un reto organizar las finanzas personales en tiempos de crisis y esta, tan larga y profunda, ha dejado en muchos hogares muy poco que organizar.
El año que comienza no va a ser fácil. Dependerá mucho de lo rápido que se acceda a la vacuna, sea seguro vivir en sociedad y de la ambición que se tenga en Washington para ayudar a pasar el bache y poner los cimientos de la recuperación.
A nivel personal y en materia de finanzas personales esta crisis nos deja una serie de anotaciones en el cuaderno de los propósitos no para el año que viene sino para cuando las circunstancias económicas permitan normalizar las cuentas. De lo que se trata es de prepararse porque nadie vio esta crisis venir hasta que estaba encima y hay que reducir los riesgos.
Expertos en el banco Chase y Ted Rossman, de CreditCards.com, nos hay ayudado a hacer una lista de las lecciones que nos deja el año y que hay que poner en práctica:
- Casi todo es negociable.
“Hemos visto que quienes han pedido que se les elimine una penalización por pago tardío, se les rebaje una comisión anual o una tasa de interés o se les suba el límite de crédito lo han conseguido”, explica Rossman.
Desde Chase se hace hincapié en que los consumidores deben conocer las fechas de cuándo se deben de abonar las facturas y cómo contactar a los acreedores. “En la vida, pasan cosas y a veces se necesita cambiar la fecha de pago o considerar opciones”. Desde este banco se anima a que se entre en contacto con aquellos a los que se les debe dinero y se comente la situación, a veces tienen planes de ayudas u opciones y pueden ayudar a buscar soluciones.
- Ahorre lo que pueda:
Tener acceso a ahorros para emergencias ha sido un alivio para muchas personas que han estado lidiando con los impactos económicos de la pandemia. “Aunque puede ser difícil ahorrar en este momento, considere poner en ahorros cualquier dinero que le llegue a final de cualquier año, ayuda, regalo, bonus, e incluso el estímulo que pueda llegar”, explica Rossman.
En general es importante ahorrar constantemente aunque sean pequeñas cantidades. Lo importante es que sea constante en el tiempo y que se haga para un propósito: salir de viaje, pagar regalos o educación, por ejemplo. No obstante el primer propósito que se debe tener es crear un fondo para emergencias y en caso de que se necesite, reconstruirlo.
Los expertos en finanzas personales sugieren ahorrar de forma automática, constantemente y antes de que el dinero llegue a su bolsillo con transferencias directas a una cuenta de ahorro.
- Haga un presupuesto
Sepa cuánto ingresa y cuánto gasta cada mes. “Es algo que le ayudará a prepararse y manejar mejor los cambios en los ingresos”, explican desde Chase. “Se puede y debe ajustar el gasto mensualmente cuando se necesite pero en materia de gastos se recuerda que es importante asignar una parte (la mayor) a los gastos obligatorios (renta, comida, billes) a los que se deseen (zapatos nuevos, una cena)y al ahorro.
- No dependa de su tarjeta de crédito
Muchos consumidores han visto sus límites de créditos rebajados de forma inesperada porque las entidades prestamistas se han puesto nerviosas por el riesgo. Esto ha pasado a quienes no usan mucho sus tarjetas y justo lo contrario, los que llegan a usar la totalidad de su línea de crédito o pagan tarde lo que deben. “Esto es un recordatorio de que la tarjeta de crédito no puede ser el fondo de emergencia porque no hay sustituto para el dinero en el banco”, explica el experto de CreditCards.
- La banca móvil ayuda
Con las órdenes de estar en casa y los aumentos de los contagios las herramientas digitales han redoblado su utilidad. Se pueden hacer como e depósito de cheques, recibir transferencias, pagar facturas y “ha permitido acceder más rápidamente al cheque de estímulo individual a través del depósito directo.
En caso de no tener una cuenta de banco tradicional es aconsejable que se abra y no se dependa de las aperturas y cierres de locales físicos. Se puede encontrar un banco con opciones asequibles en JoinBankOn.org.
- Protección ante el fraude
Esto siempre ha sido importante porque hay muchas estafas que se cometen de forma presencial pero al añadirse el espacio virtual es importante estar más atento. Rossman recuerda que las tarjetas con chip impiden el fraude con estas en las compras presenciales pero este ingenio no ayuda en las transacciones en la red que es donde muchos dólares se han perdido debido al fraude.
Este especialista recomienda usar una tarjeta de crédito para las compras en la red y no la de débito porque esta última está ligada a la cuenta de cheques mientras que una tarjeta de crédito es una línea de crédito, “es el dinero del banco (hasta que se devuelva)”. Además las tarjetas de crédito tienen mayores protecciones frente al fraude.
En este sentido, desde Chase se anima a que se haga seguimiento de las cuentas para evitar sobregiros y sorpresas. En la sucursal on line de este banco se pueden activar alertas para recibir notificaciones de bajos balances o transacciones para no perder de vista el dinero.