Bebé recién nacido en Iowa aún estaba vivo cuando madre y abuelo lo metieron en bolsa de basura antes de lanzarlo a zanja
Megan Staude, de 25 años, dio a luz al bebé en su casa en Norwalk a finales de febrero; con ayuda de su padre dejó botado al pequeño
El bebé recién nacido que fue abandonado en una carretera de Iowa presuntamente por su madre y su abuelo aún estaba vivo cuando se deshicieron del cuerpo, según revelan documentos del caso que reseñan esta semana medios como KCCI.
Megan Staude, de 25 años, dio a luz al bebé en su casa en Norwalk a finales de febrero, de acuerdo con la denuncia criminal. La investigación de los hechos arroja que el padre de la mujer y abuelo del niño, Rodney Staude, de 64, ayudó a la mujer a disponer del cuerpecito.
Investigadores indicaron en el archivo del caso que la madre ofreció versiones contradictorias a las autoridades sobre la muerte del pequeño.
En entrevistas el 8 y 9 de marzo, la mujer habría alegado que el bebé murió camino al hospital y que la instruyeron a que se llevara al niño a su casa y lo enterrara.
Sin embargo, el 13 de marzo, declaró a oficiales que el 24 de febrero, día que nació el infante, lo colocó en una caja. Añadió que el bebé lloró de vez en cuando por dos días, y que en ese periodo de tiempo, no le proveyó cuidados.
La mujer además relató que, el 26 de febrero, junto a su padre colocó al pequeño en una bolsa de basura. Para esa fecha, la víctima aún se encontraba viva. Según confesó, el bebé estuvo vivo por varios minutos antes de dejar de moverse.
La acusada agregó que, con ayuda de su padre, abandonó al recién nacido en una zanja en las afueras de Norwalk.
Los resultados de la autopsia al cuerpo del pequeño aún no han sido divulgados.
Padre e hija enfrentan cargos de asesinato en primer grado.
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