Convicto condenado a muerte en Alabama pide bloquear su ejecución tras aplicación de inyecciones letales fallidas
James Barber quien asesinó a una anciana con un martillo en su casa de Alabama pidió a través de sus abogados que detuvieran su ejecución por inyección letal por las dificultades en este tipo de métodos de ejecución
Un hombre condenado a muerte en Alabama pidió a un tribunal federal de apelaciones que bloquee su ejecución pautada para esta semana, alegando que el estado no ha hecho suficientes cambios en su sistema de pena de muerte luego de que los problemas vinculados con otras inyecciones letales causaran una pausa de tres meses en este tipo de sentencias.
La defensa de James Barber, de 64 años, presentó la moción ante el Tribunal de Apelaciones del 11° Circuito en su nombre luego de que un juez de distrito rechazara detener su ejecución a través de la inyección letal, que está programada durante un periodo de horas desde el jueves después de la medianoche, según documentos judiciales.
Los abogados argumentaron que Alabama “no ha realizado ninguna mejora significativa en su protocolo y prácticas de inyección letal desde” tres ejecuciones canceladas en 2022, tres casos en los que supuestamente el Departamento Correccional de Alabama tuvo problemas para establecer correctamente las vías intravenosas.
Se espera que Barber sea la primera persona ejecutada desde que la gobernadora del estado, Kay Ivey, solicitó al fiscal general Steve Marshall que detuviera todas las penas de muerte y pidió una “revisión de arriba a abajo del proceso de ejecución en Alabama”, en noviembre del año pasado, informó CNN.
En la apelación de Barber, el equipo legal dijo que enfrenta un “riesgo sustancial de daño severo” debido a su elevado índice de masa corporal, que de acuerdo con ellos hace que sea más difícil acceder a las venas. Aseguraron que esta complicación lo hace vulnerable a sufrir una inyección letal fallida.
Barber ha pedido que lo ejecuten con gas nitrógeno en lugar de la inyección letal. La legislatura estatal de Alabama aprobó el uso de gas nitrógeno, pero el estado ha dicho que todavía no han concluido los protocolos.
Un jurado condenó al hombre en 2003 por el homicidio de Dorothy Epps, de 75 años, en 2001, en Harvest, Alabama, de acuerdo con los documentos judiciales. Fue sentenciado a muerte en 2004.
Epps estaba en su casa cuando el sujeto, que la conocía por medio de su hija y había hecho un trabajo para ella, ingresó a la vivienda, la golpeó en la cara y posteriormente la golpeó con un martillo. Una autopsia reveló que la anciana pesaba solo 100 libras, aun así lucho por su vida, según 1819 News.
Junto con las lesiones defensivas, el médico forense encontró 19 laceraciones en la cabeza y siete fracturas en el cráneo. Asimismo, tenía contusiones, cortes y fracturas en todo el cuerpo, incluyendo fracturas de costillas y lesiones con martillo en el abdomen y la parte de abajo del pecho.
Sigue leyendo: