Trump estaría pensando en cancelar el contrato de camiones de correo eléctricos de USPS

El Servicio Postal de Estados Unidos, USPS, podría sufrir un fuerte golpe tras la entrada de la nueva Administración que está considerando cancelar los contratos de dicha empresa para electrificar su flota de reparto, como parte de un conjunto más amplio de órdenes ejecutivas dirigidas a los vehículos eléctricos.

Dos personas familiarizadas en el tema, de quienes se desconoce sus nombres, informaron a la agencia Reuters que la medida podría darse a conocer los primeros días de la Administración de Trump que inicia el 20 de enero.

Dicho anuncio formaría parte de una de las promesas de campaña de Trump quien dijo buscaría revertir los esfuerzos del presidente Joe Biden para descarbonizar el transporte estadounidense y así combatir el cambio climático.

Las fuentes también revelaron que el equipo de transición de Trump está revisando con lupa los contratos multimillonarios para deshacerse de miles de camiones de reparto a batería y estaciones de carga.

Entre la mira también se encuentra Oshkosh y Ford; los rumores de una posible cancelación ya han causado estragos al menos en Oshkosh quien vio caer sus acciones entre un 5% a 105,65 %.

A la par de la noticia, Oshkosh informó que se encuentra trabajando de la mano de USPS para diseñar y entregar una flota modernizada con una combinación flexible de vehículos eléctricos.

“Oshkosh está plenamente comprometido con nuestra sólida asociación con USPS y espera seguir proporcionando a nuestros transportistas postales vehículos de entrega modernos, confiables, seguros y sostenibles, incluso a medida que las necesidades de USPS continúan evolucionando”, declaró la empresa.

Una de las firmas de banca de inversión y mercados de capital más grandes del mundo, Jefferies, dijo este viernes que no ve como probable una cancelación total, aunque sí vislumbra unos cambios.

“Dada la necesidad de reemplazar equipos obsoletos, confiamos en que el USPS reciba vehículos nuevos en 2025; la combinación de ese pedido podría cambiar potencialmente para apaciguar a una administración que es más hostil a los vehículos eléctricos”, escribieron los especialistas.

La portavoz del equipo de transición de Trump, Karoline Leavitt, dijo a través de un comunicado que “el equipo de la nueva administración se limitó a decir que “el presidente Trump protegerá la libertad de los estadounidenses de conducir el vehículo que elijan, aumentará sus aranceles a los automóviles importados de China y salvará la industria automotriz estadounidense para las generaciones futuras. Ninguna política debe considerarse oficial a menos que provenga directamente del presidente Trump”.

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