Explosión mortal en clínica de fertilidad en California: arresto en aeropuerto JFK de Nueva York

Daniel Park, presunto cómplice en la explosión mortal de un automóvil afuera de una clínica de fertilidad en Palm Springs (California) el mes pasado, fue detenido tras aterrizar procedente de Europa en el Aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York y enviado a un tribunal federal en el centro de Brooklyn.

Park, de 32 años y residente de Kent (Washington) fue arrestado el martes por la noche en el principal aeropuerto de Nueva York y acusado de proporcionar a un terrorista materiales para fabricar bombas. Durante una breve audiencia en Brooklyn tarde de ayer, un juez ordenó la extradición de Park a California para enfrentar los cargos allá, informó ABC News.

Está acusado de enviar a Guy Bartkus seis paquetes que contenían más de 200 libras (90 kilos) de nitrato de amonio desde Seattle (Washington) a Twentynine Palms (California). Park supuestamente compartía las ideas anti natalidad extremas del sospechoso de Bartkus y las había publicado en foros de internet desde 2016.

Park supuestamente pasó dos semanas visitando a Bartkus a finales de enero y febrero, realizando experimentos en su garaje. Días después del atentado del 17 de mayo, Park viajó a Europa, volando a Dinamarca y luego a Polonia. Fue detenido en ese país el 30 de mayo y deportado el martes por la noche.

Barkus, de 25 años, murió y otras cinco resultaron heridas en la explosión afuera de la clínica de la red “American Reproductive Centers”, que realiza tratamientos de fertilización in vitro. Se cree que estuvo detrás del ataque, motivado por “ideas nihilistas”.

Park supuestamente tenía recetas para crear una bomba similar a la de la explosión en Oklahoma City de 1995, el acto de terrorismo interno más mortífero en la historia de Estados Unidos, que causó 168 personas fatalidades. Las redes sociales de Park mostraban que intentaba reclutar en línea a otras personas con ideologías afines.

La explosión destruyó la clínica de fertilidad y destrozó las ventanas de los edificios cercanos a lo largo de la calle. Testigos describieron un fuerte estruendo seguido de una escena caótica, con gente gritando aterrorizada y vidrios esparcidos por la acera y la calle.

Un alto funcionario del FBI calificó la explosión como posiblemente el mayor atentado con bomba en la historia del sur de California. Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.