Tecnología pudo haber evitado tragedia en Metro-North
El sistema de control positivo (PTC) habría evitado el descarrilamiento del domingo, pero, por su alto costo, no ha sido instalado por la MTA
YONKERS, Nueva York, EE.UU. — Ante la revelación hecha por expertos ayer, de que el tren de pasajeros de Metro-North se descarriló en El Bronx mientras entraba a una curva pronunciada a tres veces la velocidad permitida, han surgido interrogantes sobre si la tecnología hubiese podido haber evitado la tragedia.
Las autoridades de seguridad han defendido lo que se conoce como tecnología de control positivo desde hace decenios, pero la industria de los ferrocarriles ha tratado de posponer su instalación debido al alto costo y asuntos tecnológicos.
Los investigadores no han determinado todavía si el accidente, en que perecieron cuatro personas y más de 60 quedaron heridas, fue el resultado de un error humano o una falla mecánica. Pero algunos expertos en seguridad dijeron que la tragedia quizás se hubiera evitado si el Ferrocarril Metro-North hubiera implementado esa tecnología.
“Este incidente subraya la importancia de implementar medidas de seguridad adicionales como ese sistema”, dijo el senador Richard Blumenthal, demócrata por Connecticut, estado donde Metro-North también presta servicios. “Yo lo pensaría mucho para ser más flexible y dar más tiempo (a la empresa ferrocarrilera)”.
El tren iba a 131 kilómetros por hora (82 mph) cuando entró a la curva, que tiene un límite de velocidad de 48 kmh (30 mph) el domingo por la mañana y se salió de la vía, dijo ayer Earl Weener, miembro de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB). Weener citó información obtenida de los grabadores de parámetros del tren. Los investigadores también han comenzado a entrevistar a la tripulación.
La velocidad asombró a las autoridades. “Tragué en seco”, dijo el senador Charles Schumer, demócrata por Nueva York. Por su parte, el gobernador Andrew Cuomo dijo que la conclusión de la NTSB deja en claro que “el exceso de velocidad fue una causa fundamental” del descarrilamiento y prometió “asegurar que cualquier parte responsable vaya a la justicia” después que los investigadores determinen por qué el tren iba a tanta velocidad.
“En este momento no podemos decir” si fue resultado de problemas con los frenos o un error humano, dijo Weener, quien habló de la posibilidad de que se bajó el control de velocidad y se aplicaron los frenos demasiado tarde para evitar el accidente.
Weener dijo que el acelerador se bajó a cero seis segundos antes que el tren descarrilado se detuviera —“demasiado tarde” para un tren que iba tan rápido— y que los frenos se aplicaron cinco segundos antes que el tren se detuviera.
Un tren que va a 132 kmh recorre entre 400 y 800 metros antes de detenerse, dijo Kevin Thompson, portavoz de la Administración Federal de Ferrocarriles (FRA).
Los investigadores no han identificado ningún problema en los frenos durante las nueve paradas que hizo el tren antes del descarrilamiento, dijo Earl Weener, quien declinó revelar lo que los investigadores conocen sobre la versión del ingeniero William Rockefeller sobre los hechos.
Dijo que todavía no están los resultados de las pruebas de alcohol y drogas. Los investigadores también analizan el teléfono móvil del ingeniero porque las personas que conducen el tren no pueden llevar un celular cuando el tren está funcionando.
El ingeniero Rockefeller “está completamente traumatizado por lo que ha sucedido” dijo Anthony Bottalico, director ejecutivo del sindicato de empleados ferrocarrileros.
“Es un ser humano con un historial impecable, eso es lo que sé. Es diligente y competente” dijo Bottalico. Rockefeller, de 46 años, es ingeniero desde hace 11 años y empleado de Metro-North desde hace 20, dijo.
El sistema de control positivo (PTC) tiene por fin reducir los errores humanos que son la causa de aproximadamente 40% de los accidentes de tren, y usa tecnología GPS, radio y computadoras para monitorear el tren y evitar que choque, se descarrile o entre en la vía equivocada.
La NTSB ha exhortado a los ferrocarriles a instalar el PTC en alguna forma desde 1970, y después de un choque de frente en 2005 que dejó 25 muertos cerca de Los Angeles, el Congreso ordenó a los ferrocarriles en 2008 que instalen la tecnología antes de diciembre de 2015.
Metro-North ha dado pasos para adquirir la tecnología, pero como muchos otros ferrocarriles, ha pedido más tiempo para implementar un sistema costoso que las empresas del sector dicen que tiene obstáculos tecnológicos y de otro tipo.
Grady Cothen, exfuncionario de seguridad de la FRA, dijo que un sistema PTC habría evitado el accidente del domingo si los frenos estaban funcionando normalmente. Y Steve Ditmeyer, exfuncionario de la FRA que ahora es profesor en la Universidad Estatal de Michigan, dijo que hubiera evitado, mediante la aplicación de los frenos, que el tren excediera el límite de velocidad.
“Un sistema PTC debidamente instalado hubiera evitado el accidente”, dijo.
La Autoridad Metropolitana de Transporte, que opera Metro-North, comenzó a planear la implementación del sistema tan pronto como se aprobó la ley, dijo Marjorie Anders, portavoz de la entidad. Después de asuntos preliminares como la compra de radiofrecuencias, la MTA otorgó contratos por valor de $428 millones en septiembre para instalar el sistema en Metro-North y el Long Island Rail Road.
Pero la MTA defiende la extensión de la fecha tope hasta 2018, alegando que es difícil instalar el sistema en más de mil vagones y 1,930 kilómetros de vías.