Reik revela sus vivencias (video)

GUADALAJARA, México.— La mayoría de la gente cree que la vida de un artista es perfecta, sin embargo, los integrantes de Reik cuentan historias de lo que han tenido que pasar al momento de llegar a un hotel y tratar de descansar previo a cumplir sus actividades profesionales.

“Han habido todo tipo de hoteles en esta vida”, comentó Bibi entre risas.

“Al principio de nuestra carrera”, contó Julio, “hicimos alguna promoción y había un famoso Hotel Beltrán, que la verdad estaba feo, creo que estaba en Los Mochis; alguien se encontró una cucaracha en su cuarto. Una vez en Los Ángeles salía agua amarilla de la llave y las sábanas estaban sucias”.

En ese aspecto, Jesús, el vocalista, es más especial porque antes de un show quiere descansar para estar al 100 en el espectáculo.

“Yo soy el que se queja más de los hoteles, porque cuando es día de concierto a mí me gusta quedarme en mi cuarto encerrado y no soy de ir a comer o ‘turistear’; me quedo en mi cuarto, en paz y si no estoy en un espacio que me agrade pues me bajonea muchísimo”, contó Jesús.

“Una vez en Buenos Aires, la segunda vez que fuimos a tocar, nos pusieron un hotel horrible; veníamos de una gira súper pesada —al principio ya ves que te cuidan menos y te pagan menos— estábamos muertos y me acuerdo que tuve que decir ‘híjole, hay una mancha como de quién sabe qué en mi sábana y nos cambiamos de hotel”, externó el vocalista.

Nunca falta aquella fan que se entera en qué piso están y sin importarles la hora le tocan la puerta para una foto o un autógrafo.”Incidentes con fans han pasado un montón. En la primera gira, y recientemente también, de estar en mi habitación y que alguien llama a la puerta. Siempre me imagino que es uno de nosotros, porque quién más me requiere si no es un staff del hotel o alguien de nosotros mismos, y abres la puerta en calzones o sin camiseta, y es un fan que quiere una foto”, platicó Bibi.

“Una vez una fan estaba encerrada en mi habitación esperando a que llegara”, agregó Jesús, “cuando abrí la puerta, salió la niña y nada más la sacaron; no pasó nada pero desde entonces cada vez que entro a mi cuarto abro todas las puertas”.

Es tanto el movimiento que tienen sus vidas que los intérpretes de Creo en Tí a veces se desubican del lugar donde despiertan.

“Algo que me pasa muy seguido es que me despierto en la noche y camino hacia donde yo creo que está el baño pero me quedé con la idea del hotel anterior y me estrello; me desubico un montón”, compartió Jesús.

“Lo que está chistoso es el contraste”, añadió Julio, “de estar con muchísimos gritos y de repente estás en tu habitación solo, sin un ruido. Es muy loco. A través del tiempo se vuelve algo normal, lo único que pasa es que a veces extrañas tu cama, tu casa, tu familia”.