Durante las fiestas de Navidad y de Año Nuevo aumenta el sexo entre las parejas. Y es que  el baile, las bebidas alcohólicas, la alegría y el buen humor, que están presente en esta época, son los ingredientes perfectos para unos encuentros íntimos más intensos y frecuentes.

De hecho, investigadores estadounidenses especializados en biorritmos y los productores de juguetes sexuales siempre ha coincidido en señalar que en Navidad se alcanza el pico de actividad sexual y que es la época del año en la que más se aumentan las ventas de productos eróticos.

La sexóloga Myriam Balbela, con práctica en Los Ángeles, por su parte asegura que el incremento de la actividad sexual en diciembre —conocido como el “festival de la fertilidad”— se refleja año tras año en el alto índice de nacimientos que se da en Estados Unidos en septiembre.

Según Balbela el incremento de la actividad sexual se da ante la mayor oportunidad que tienen las parejas que carecen de tiempo libre durante el año de recrearse, relajarse y socializar.

“El ambiente de vacaciones y fiesta hace que florezca en esta época la intimidad”, resalta.

La otra cara de la moneda

Pero no todo es color de rosa en esta temporada festiva.

Algunas personas tienden a tener prácticas de alto riesgo, que consisten en el consumo de alcohol, el uso de drogas ilícitas y fármacos no recetados, así como los encuentros sexuales no seguros.

Una de estas prácticas sexuales no seguras es el llamado “efecto Santa Claus” que, según explica la sexóloga, hace referencia al tiempo festivo —entre la Navidad y el Año nuevo— que los adolescentes eligen para tener sus primeras prácticas sexuales con penetración.

“Obviamente, los chicos aprovechan esta temporada porque los padres se encuentran distraídos en las fiestas y al sentirse más liberados de su supervisión buscan el momento para su primer encuentro sexual con coito, que en muchos casos resulta en un embarazo precoz”, detalla la entrevistada.

Y si bien es cierto que en esta época del año en la mayoría de las parejas se incrementa el apetito sexual, en algunas más bien se merma debido al estrés, los conflictos emocionales y el Trastorno Afectivo Estacional (TAE).

El estrés se presenta ante las mismas actividades y compromisos que devenga la temporada decembrina, los conflictos por las frustraciones acumuladas ante las metas que no se lograron y el TAE por la soledad que algunas personas sienten al estar en esta época del año sin pareja.

Recomendaciones

Para evitar que el apetito sexual se mantenga vivo en esta temporada decembrina, la sexóloga Myriam Balbela aconseja:

• Evitar las discusiones o conflictos con la pareja
• No traer a colación en la temporada festiva los problemas que se presentaron durante el año en el cotidiano vivir
• Evitar la tristeza o los recuerdos que conducen a la depresión. Y de estar experimentando el Trastorno Afectivo Emocional (TAE) por no tener pareja, acercarse a personas queridas para no sentir la soledad o poner en practica la satisfacción sexual personal a través de la masturbación
• No abusar del consumo de alcohol porque puede provocar disfunción eréctil