Limpiar, tonificar, hidratar y proteger son los pasos fundamentales en la rutina facial diaria; una regla que se intenta seguir con rigurosidad y a la que se le está sumando un quinto componente que promete ser la panacea de la belleza: el serum (o suero en español), que actúa sobre alguna necesidad específica como hidratar, tensar, iluminar o antioxidar.
¿Cuál es su importancia y en qué momento se aplica? ¿Cuántas cremas necesita en realidad tu piel al día? Se aplica luego de limpiar y tonificar el rostro y antes de utilizar la crema habitual de día o de noche. Sobre el número de productos, los especialistas afirman que todo depende de tu edad y del fotoenvejecimiento que presentes, pero aseguran que con este quinteto reinarás.
No se trata de un invento de ayer, nació en Japón en 1983 como un desarrollo de la casa de belleza Shiseido, según Jayme Cueva, científico de desarrollo de productos Belcorp (L’bel), quienes buscaban fórmulas más concentradas y con mayor eficacia. “Se diferencia de una hidratante por su textura y por los ingredientes.
En general es más líquido, más fluido y nada grasoso, de modo que su alta concentración de activos penetra de forma rápida y profunda en la piel. Actualmente los sueros son productos de aplicación diaria y los más comunes son los antienvejecimiento, antimanchas, iluminadores, alisadores, antiflacidez, entre otros”, explica Cueva.
“Los serums pueden ser aplicados en cualquier tipo de piel, ya que no resecan las dermis secas, y no engrasa ni satura las mixtas a grasas, pues no contiene lípidos –asegura la dermatóloga Lina María Llanos, asesora de SkinCeuticals–. Cuando hablamos de sueros, hablamos del vehículo en el que se preparan los productos que se aplican en la piel, y estos pueden llevar principios activos como vitaminas C y B5, otros antioxidantes como ácido ferúlico y phloretina, alfa hidroxiácidos como los ácidos salicílico o glicólico, despigmentantes, ácido hialurónico, entre otros”.
De acuerdo con Paola Jaramillo, experta en belleza de La Riviera: “Dependiendo de la necesidad, existe un tipo de serum para cada problema: hidratante, matificante para pieles grasas, antiarrugas, efecto reafirmante, regenerador global, aclarador o despigmentante, antiedad global. Necesarios cuando la piel necesita un refuerzo extra porque se ve cansada, con líneas y arrugas, falta de firmeza u opacidad por las manchas”.
Como bien se explicó anteriormente y como recalca Mariana Guevara, formadora de la división productos de lujo de L’Oréal Colombia: “Los serums son ideales para acompañarlos con un hidratante, a fin de obtener mayores beneficios sin un gran espesor, pues solo dejan una sensación de suavidad en la piel, pero esta no necesariamente queda protegida ni humectada, por lo que debes completar con una hidratante nutritiva y factor de protección solar”.
Dos maneras de aplicarlos
Sobre la piel limpia y seca por la mañana y/o por la noche. Paola Jaramillo recomienda: Aplicar sobre la palma de las manos dos o tres gotas. Presionar las palmas una con otra sin frotar para que se caliente a la temperatura de la piel. Ponlo sobre el rostro con presiones leves y deja que se absorba.
“Distribúyelo en cinco puntos estratégicos: frente, nariz, mejillas y mentón -recomienda Luciana Lima, científica de desarrollo de productos Belcorp- y espárcelo utilizando los dedos anular y del corazón masajeando suavemente de forma ascendente. Luego, de la manera que tú elijas, debes continuar con la crema hidratante y tu rutina habitual”.
A elegir
Resveratrol be, de SkinCeuticals – Este poderoso antioxidante de noche con una concentración maximizada del 1 por ciento de resveratrol puro y estable, potenciada sinérgicamente con 0,5% de baicalina y el 1 por ciento de alfa-tocoferol (vitamina E).