México descarta suspender cooperación de seguridad con EEUU
Secretario de Gobernación explica por qué mantendrá sus acuerdos
México no busca suspender la cooperación en seguridad tras el anuncio del despliegue de la Guardia Nacional de Estados Unidos en la frontera, pese al pronunciamiento aprobado de forma unánime por el Senado de la nación latinoamericana.
“México no tiene intención de suspender (la cooperación). Está en los mejores intereses del país tener una relación diáfana, abierta, transparente y franca con nuestro aliado comercial más importante, socio y vecino”, dijo en declaraciones a Televisa el titular de la Secretaría de Gobernación, Alfonso Navarrete.
Sin detallar cuándo, Navarrete explicó que el presidente Enrique Peña Nieto fijará una posición, y el Gobierno de México “acatará la misma”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles una orden para desplegar “lo antes posible” un número no determinado de militares de la Guardia Nacional en la frontera con México, en un intento de marcar músculo ante lo que considera un aumento intolerable de la inmigración ilegal.
A su vez, el Senado mexicano exigió a Trump respeto para al pueblo de México y solicitó al Ejecutivo suspender la cooperación bilateral en migración y delincuencia organizada mientras el líder estadounidense “no se conduzca con civilidad y respeto”.
Navarrete explicó hoy que espera recibir en breve el exhorto de la Cámara Alta.
Puntualizó que el Ejecutivo está a la expectativa de ver en qué consiste exactamente el despliegue militar en la frontera, pues puede ser un “evento de carácter publicitario”.
Y recordó que anteriores mandatarios estadounidenses también habían tomado esta decisión, por ejemplo para controlar el flujo de armas norte-sur, lo que llega a ser “conveniente”.
Instó entonces a esperar “los alcances” de la medida, aunque puntualizó: “Desde luego cualquier expresión que daña una buena relación y muestra un acto de fuerza genera una interpretación hostil y poco amigable hacia el gobierno que recibe esta expresión”.
Finalmente, aclaró que el Gobierno mexicano expresará su “rechazo” si la medida, finalmente, va en prejuicio de connacionales o migrantes protegidos en las leyes mexicanas.
La decisión de Trump llegó después de días de quejas del presidente contra una caravana de cientos de migrantes centroamericanos que se dirigen a Estados Unidos a través de México, aunque la Casa Blanca atribuyó la medida al aumento en la llegada de indocumentados al país desde febrero.
En un comunicado emitido este jueves, cancillería mexicana aseveró que el Ejecutivo velará por la soberanía e intereses nacionales y dio detalles de una conversación entre el canciller Luis Videgaray y la secretaria de Seguridad Interior de Estados Unidos, Kirstjen Nielsen.
Nielsen explicó que la Guardia Nacional únicamente realizará labores de apoyo al Departamento de Seguridad Interior y los militares no portarán armas ni realizarán funciones de control migratorio o aduanero.
Además, comparó el despliegue con uno de 2006, durante la administración del presidente George W. Bush, con la Operación Jump Start, y en 2010, durante la administración de Barack Obama, con la Operación Phalanx, agregó el boletín.
“Si el anunciado despliegue de la Guardia Nacional se tradujera en una militarización de la frontera, ello dañaría gravemente la relación bilateral”, apuntó Cancillería.