El secreto para mantener tu corazón 30 años más joven

Detener el proceso de envejecimiento en tus órganos internos puede ser mucho más importante y beneficioso que tratar de detenerlo en tu piel. Mantener joven tu organismo, especialmente el cerebro y el corazón, puede ser la clave para vivir una adultez plena y con calidad de vida.

Un estudio reciente del Laboratorio de Rendimiento Humano de la Universidad Ball State, en Indiana, reveló un secreto para mantener tu corazón 30 años más joven.

La investigación, liderada por el fisiólogo del ejercicio Scott Trappe, analizó la salud cardiovascular y la salud del músculo esquelético de 70 personas sanas de 75 años en promedio, hombres y mujeres. Dividió a los participantes en tres grupos: adultos mayores que hacían ejercicio cardiovascular al correr o andar en bicicleta de cuatro a seis días de la semana; adultos mayores que hacían ejercicio ocasionalmente; y jóvenes de 25 años de edad en promedio que hacían ejercicio en la misma cantidad que el primer grupo.

Luego de analizar diversos marcadores en los tres grupos, lo que Trappe encontró fue que, los adultos mayores que habían realizado ejercicio de manera usual tenían corazones en condiciones equivalentes a las de personas de 40 a 45 años de edad. Lo más sorprendente es que los músculos de los deportistas de 75 años eran casi iguales a los músculos de los deportistas de 25 años.

La investigación, publicada en el Journal of Applied Physiology, señala que la capacidad para procesar el oxígeno disminuye un 10 por ciento por década después de los 30 años. Y aunque durante las primeras décadas quizá los efectos de esta pérdida no sean muy evidentes, a la larga las consecuencias físicas serán más notables, pues esta reducción implica un riesgo creciente de desarrollar enfermedades crónicas o condiciones que comprometan la capacidad de una persona para moverse por sí sola, o incluso, que pueden provocar la muerte.

Trappe afirma que hacer de 30 a 60 minutos de ejercicio al día puede ser clave para mantener el corazón joven y tener una vejez saludable de alta calidad. Y no es necesario hacer rutinas extenuantes ni convertirse en un deportista de alto rendimiento: caminar diariamente a un ritmo aceptable ofrece beneficios importantes y sustanciales para la salud.