¿Cuándo se debe usar una compresa fría y cuándo una caliente para tratar dolores en el cuerpo?

Hay determinadas situaciones donde una funciona mejor que otra

Compresa-Fría

Crédito: pixabay.com

Una de las formas tradicionales de tratar enfermedades o condiciones leves es el uso de compresas. Las compresas, aunque sean simples, pueden ser instrumentos efectivos para apaciguar el cuadro sintomático de los dolores reumáticos.

Las compresas pueden ser frías o calientes dependiendo de la temperatura del agua con la cual se remojen. Esto permitirá que algunas compresas sean más aptas para tratar condiciones o enfermedades con mejor efectividad que otras.

¿Cuándo usar compresas frías?

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Fuente: Pixabay.com

Las compresas frías son ideales para aliviar el dolor después de haber sufrido golpes. Las circunstancias del golpe no importan mucho, pero sí importa dónde se dé, dado que no deberías colocarte compresas frías en la espalda, pecho, y barriga.

Puedes colocarte una compresa fría después de correr en el tobillo o en la rodilla si tienes dolor. Otra alternativa es darse un baño con agua a baja temperatura.

La tendinitis es otra de las condiciones que puedes tratar con una compresa fría. Puedes usarlas también en caso del dolor de un diente, una caída, o 48 horas después de una inyección.

Beneficios de las compresas frías

Algunos de los efectos de las compresas frías son los siguientes:

  • Disminución del flujo sanguíneo en la región.
  • Disminución de la inflamación.
  • Proporcionan un efecto analgésico en la zona afectada, 5 minutos después del uso.

¿Cuándo usar compresas calientes?

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Fuente: Pixabay.com

Las compresas calientes que se humedecen con agua tibia son excelentes para tratar dolores reumáticos. Se indican especialmente para dolores de espalda o del pecho, aunque realmente se pueden colocar en cualquier parte del cuerpo.

Una contraindicación al respecto: las compresas calientes pueden ser usadas siempre y cuando el paciente no tenga fiebre, dado que su uso elevaría su temperatura corporal.

Las compresas calientes también pueden ser usadas en presencia de dolor en la columna, manchas moradas en la piel, torticolis, espinillas, forúnculos.

Beneficios de las compresas calientes

  • Aumento del flujo de sangre en la zona donde se aplique.
  • Aumento de la movilidad en la zona afectada.
  • Incentivan la relajación.

Ahora que conoces la diferencia puedes aplicar ambas para disminuir el dolor según la condición del paciente y la zona afectada.

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