2,700 empleos serían eliminados al reestructurar el caótico Metro de Nueva York
La junta de la MTA votará sobre el plan la próxima semana
De 1,900 a 2,700 empleos serían eliminados para mejorar la eficiencia en la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA), agencia encargada de los buses y el Metro de Nueva York.
Los cambios y las reducciones en la fuerza laboral le ahorrarían a la autoridad entre $370 y 530 millones de dólares anuales durante tres años.
Los recortes se harían bajo la dirección del controvertido “Plan de transformación” que un consultor externo ha creado apresuradamente para reducir la burocracia, racionalizar las operaciones y mejorar el servicio, resumió amNY.
La junta de la MTA está programada para votar sobre el plan la próxima semana.
En abril, se denunció que supervisores del Metro ganaban más que su presidente y que pagos de sobretiempo superan el dinero percibido por la última alza de tarifas, según un informe de Empire Center, un grupo de expertos sin fines de lucro y no partidista, con sede en Albany.
El plan propuesto, elaborado por la firma Alix Partners por un monto de $4.1 millones de dólares, se presentó por primera vez como resumen el viernes y describe un proceso de dos años.
Los observadores han criticado ampliamente el informe, con detractores que incluyen activistas del transporte, sindicatos, grupos gubernamentales y el gobernador Andrew M. Cuomo.
El gobernador controla la MTA y ordenó la creación del plan a través de un presupuesto estatal que también prevé ingresos adicionales con nuevos impuestos y el próximo peaje de precios de congestión para circular en Midtown.
Los delegados también han criticado el proceso, que tuvo lugar en su mayoría a puerta cerrada y sin la participación del público, en una breve ventana de tres meses.
Los recortes de empleos provendrían principalmente de la fuerza gerencial, aunque algunos empleos sindicales y obreros también podrían entrar.
Las reducciones de la fuerza laboral se producirían primero mediante jubilación y eliminación de puestos vacantes, pero no se sabe cuánto tiempo tomaría ese proceso ni dónde serían específicamente los recortes.
John Samuelsen, presidente de Sindicato de Trabajadores del Transporte (TWU International) y miembro de la junta de la MTA, adelantó que la idea de que se podría mantener el funcionamiento del Metro con una reducción del personal de tránsito es “ridícula” y absolutamente engañosa”. El sindicato actualmente está negociando un nuevo contrato.
La oficina de Cuomo recibió información sobre el plan de reorganización a medida que se desarrolló y ofreció comentarios. Pero el martes, el gobernador criticó las recomendaciones de Alix Partners por no incluir las fechas de finalización de tareas y medidas de desempeño. Dijo que fue una “omisión grave”, en una carta que envió a la junta de la MTA.
“No hay más excusas, política, drama, chivos expiatorios o tolerancia al incumplimiento”, escribió Cuomo. “O la administración completa sus tareas o habrá incumplido su deber público”.
Pero según algunos, Cuomo es parte del problema y está utilizando el plan para tomar el poder de Andy Byford, presidente de NYC Transit.
“Más circo de distracción del gobernador Cuomo”, dijo Rachael Fauss, del grupo Reinvent Albany, sobre la carta. “Quiere controlar completamente la MTA mientras finge que no. Cuando se trata de la MTA, Cuomo es un maestro de tres cosas: culpar a los demás por los problemas de la MTA; sembrar el caos en lugar de fomentar la estabilidad y la gestión profesional; y hacer todo de forma apresurada y secreta”.
A fines de enero el senador James Skoufis, quien encabeza la Comisión de Investigaciones de la Cámara Alta estatal, afirmó desde Albany que “MTA es el sistema de tránsito más sucio, menos confiable, más lento y más costoso del mundo”.