NYC declara fin del brote de sarampión aunque la amenaza continúa
Desde mediados de julio no se reportan nuevos casos de la infección en la Gran Manzana, pero la amenaza sigue existiendo con otros brotes en otras partes del mundo
Luego del mayor brote de sarampión en la ciudad de Nueva York en casi tres décadas, que se empezó a reportar desde octubre de 2018, especialmente en vecindarios de Brooklyn, el Departamento de Salud de la Ciudad (DOHMH) declaró este martes el fin de la emergencia de salud pública, pero insistió en no bajar la guardia, porque el virus continúa siendo una amenaza.
Las autoridades de Salud informaron que desde mediados de julio, no se han diagnosticado nuevos casos de la infección viral en la Gran Manzana, pero podrían agregar casos retrospectivamente, a medida que se identifiquen.
“Esos casos se atribuirán al mes en que se produjo la erupción cutánea. Por lo tanto, el recuento de nuevas infecciones puede aumentar incluso luego que hemos declarado el fin del brote. Además, la ciudad de Nueva York, puede reportar futuros casos de sarampión, no asociados con esta emergencia”, explicó la comisionada de salud, la Dra Oxiris Barbot.
En este reporte oficial se subraya que aunque no se hayan identificado transmisiones del sarampión en la ciudad de Nueva York en las últimas semanas, la amenaza sigue existiendo con otros brotes en los Estados Unidos y en todo el mundo.
Esta enfermedad viral que puede llegar a ser mortal y es de muy fácil transmisión, está latente en Europa e Israel, así como en países de América del Sur, África y Asia.
“Para protegerse, los neoyorquinos deben consultar con su proveedor médico, antes de viajar internacionalmente, para asegurarse de que sean inmunes al sarampión o que hayan sido vacunados. Los bebés de 6 a 11 meses también deben vacunarse antes de viajar fuera de la ciudad”, insistió Barbot.
Un foco controlado
Desde que comenzó el repunte de nuevas infecciones en octubre de 2018, 654 personas fueron diagnosticadas con sarampión en los cinco condados. Más del 72% de esos casos ocurrieron en el vecindario de Williamsburg, con una gran población de judíos ortodoxos, una comunidad en donde por razones religiosas existe resistencia a la vacunación.
“Poner fin al brote de sarampión requirió una amplia colaboración con organizaciones comunitarias y líderes judíos. Ayudaron a fomentar las vacunación y alcanzar niveles récord de inmunización en partes de Brooklyn”, dijo el alcalde Bill de Blasio.
El histórico aumento de casos de sarampión registrado en la ciudad de Nueva York, obligó también a la Asamblea Estatal a aprobar en junio pasado una ley que prohíbe las excepciones de inmunizaciones por razones no médicas.
“El anuncio sobre el hecho de que el brote de sarampión ha terminado, es una noticia que llega en un momento en el cual los estudiantes regresen a los centros escolares”, dijo el concejal Mark Levine, presidente del Comité de Salud del Concejo Municipal.
Levine reconoció el liderazgo audaz de promotores de salud dentro de las comunidades judías, más directamente afectadas por este brote.
“Esta lucha contra la negación de la ciencia, que alimenta el movimiento antivacunas continúa. Nuestro mensaje es claro: imploramos a los neoyorquinos que se aseguren de que ellos y sus hijos estén al día con las vacunas ”, insistió el concejal.
Pero aunque el brote ahora se encuentra controlado, el comisionado de la División de Control de Enfermedades del DOHMH, Dr. Demetre Daskalakis, apuntó que “solo se necesita un caso para comenzar un brote nuevo, por ello, continuaremos instando a todos a confirmar que son inmunes al sarampión, mirando sus historiales de vacunación o consultando con un proveedor de atención médica”.
Y justamente para evitar nuevas alarmas en la salud pública, las autoridades de la Ciudad inician una nueva campaña publicitaria, bajo la consigna: “No vacile. ¡Vacúnese! la cual recuerda a los padres y representantes que vacunen a sus hijos a tiempo. La campaña se realizará en línea, en paradas de autobús, Subway y en periódicos locales en inglés, español y chino.
“Quien no se vacuna aquí, es porque no quiere”
Para la inmigrante mexicana Gregoria Rojas, la vacunación es un proceso totalmente rutinario. Comentó que luego de más de 14 años viviendo en Nueva York, todos sus hijos desde que nacieron, han tenido muchas opciones para la inmunización.
“Desde que yo vivía en México la vacunación era algo normal. Yo vengo de una familia muy numerosa de 13 hermanos. Siempre hemos estado muy pendiente de eso, porque sabemos que es más costoso enfermarse de un mal, que se puede prevenir fácilmente”.
La inmigrante dijo estar lista para enviar a sus dos niños a la escuela “debidamente vacunados” y valoró que aquí en la ciudad se “cuenta con trabajadores sociales y promotores que están chequeando constantemente los planes de salud para evitar enfermedades. Quien no se vacuna aquí, es porque simplemente no quiere hacerlo”.
Rojas vive en el vecindario de Sunset Park, en donde en medio de la emergencia de reportaron 4 casos en el pasado mayo, lo cual obligó a las autoridades a elevar las campañas de inmunización.
Cifras de la guerra contra el sarampión:
- $6 millones de dólares invirtió la Ciudad para revertir la emergencia sanitaria causada por el brote de sarampión.
- 500 empleados del Departamento de Salud fueron incorporados a la guerra al sarampión.
- 5,000 vacunas fueron administradas desde el repunte de casos en octubre de 2018.
- 52 hospitalizaciones relacionadas con el sarampión y 16 ingresos a cuidados intensivos se han registrado en NYC.
- 80% de los diagnosticados con la enfermedad viral, fueron personas menores de 18 años.
- 73% de los casos eran personas no vacunadas, 7% se trataba de inmunizados de manera incompleta .
- 15% de los contagiados ignoraban su estatus de vacunación.