Lo que debe pasar para que haya un segundo cheque de estímulo
Todo sigue en manos de los congresistas
Un segundo cheque de estímulo debió ser aprobado hace unos días, pero las disputas entre republicanos y demócratas impidieron su aprobación.
La opinión pública ahora vive con la incertidumbre sobre la posibilidad de recibir un nuevo alivio en momentos en que la pandemia del coronavirus sigue golpeando la economía.
El presidente Donald Trump decidió un alivio por su cuenta el fin de semana al extender los beneficios extras por desempleo, aunque solamente por $400, y recortar el impuesto de nómina para el Seguro Social. Congresistas de los dos partidos reconocieron que los decretos del presidente no son suficiente para ayudar a la recuperación total de la economía.
Es por eso que todavía se espera un acuerdo en el Congreso para un nuevo paquete que incluya un segundo cheque de estímulo para los contribuyentes. Para que esto ocurra se necesita que la nueva ley sea aprobada en la Cámara y el Senado. La primera ya aprobó la ley HEROES, pero se sabía que la mayoría republicana del Senado no aprobaría el proyecto sin antes hacerle modificaciones.
Si hay acuerdo en el pleno del Congreso, el proyecto pasará al escritorio del presidente Trump, quien podría vetar la ley o simplemente firmarla. Por el momento el ejecutivo ha hecho parte de las negociaciones por lo que cualquier acuerdo sería aprobado por el presidente.
El Departamento del Tesoro estaría enviando los cheques una vez la ley sea oficial. Se espera que un segundo cheque de estímulo se envíe más rápido que el primero por parte del IRS.
En conclusión, un segundo cheque depende de la voluntad política entre republicanos y demócratas. Los primeros intentan comprar tiempo mientras esperan por números que indiquen que lo peor de la pandemia ya pasó en el país. Los demócratas quieren que sus rivales entiendan que el daño a la economía es enorme ya que sin una vacuna es difícil que todo vuelva a la normalidad en los próximos meses.
Los contribuyentes pueden presionar un acuerdo llamando o escribiendo a las oficinas de sus representantes en el Congreso.