Qué sucede a tu organismo cuando dejas de agregar sal a tu comida
Reduces tu riesgo de ataque cardíaco y otros 6 beneficios más
La mayoría de las personas consumen demasiada sal y muchas veces sin siquiera notarlo. El exceso de sodio (mineral presente en la sal) tiene consecuencias “nefastas” para la salud, en particular la hipertensión arterial, señala la Organización Mundial de la Salud.
Necesitas muy poca sal
En promedio ingerimos de 9 a 12 gramos por día casi el doble de la ingesta máxima recomendada, que son 5 gramos (un poco menos que una cuchara de té). El sodio es necesario en poca cantidad, menos de 500 miligramos por día. “Eso es una pizca, la cantidad en menos de ¼ de cucharadita”, según la Asociación Americana del Corazón.
El sodio lo podemos encontrar en estado natural en diversos alimentos, como la leche, la carne y los crustáceos. Pero buena parte del exceso de sodio proviene de alimentos procesados como la sopa instantánea, pan blanco, embutidos, cubitos de pollo, salsa de soja. Otra manera de aumentar la ingesta es agregar sal a los alimentos que cocinas.
Así que limitar el consumo de comida procesada, no usar sal durante la preparación de los alimentos y olvidarte del salero en la mesa reducen la ingesta de sodio. ¿Cuáles son las ventajas?
1. Tendrás menor hinchazón
El consumo de alimentos con alto contenido de sal provoca que tu cuerpo retenga líquidos. El cuerpo está tratando de equilibrar los altos niveles de sodio reservando más agua. La retención de agua ocurre en el sistema circulatorio o dentro de los tejidos y cavidades. Puede causar hinchazón en manos, pies, tobillos y piernas.
Reducir tu consumo te ayuda a reducir la hinchazón y sentir menor pesadez.
2. Mejoras tu presión arterial
Incluso una reducción modesta en el consumo de sal durante un mes o más puede resultar en una mejora significativa en la presión arterial.
Los niveles de la tensión bajan tanto en personas con hipertensión como en aquellos con tensión sanguínea normal, según un estudio publicado en el British Medical Journal.
3. Reduces tu riesgo de infarto de miocardio
Al reducir la ingesta de sodio, además de contribuir a la disminución de la tensión arterial, también puede reducir el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.
4. Reduces tu riesgo de muerte
Bajar el consumo de sal en la dieta ayuda es un factor importante, además del consumo de vegetales y la actividad física para reducir el riesgo enfermedades cardiovasculares (ECV). Las ECV son la principal causa de defunción en todo el mundo (alrededor del 30%), principalmente por cardiopatías y accidentes cerebrovasculares, señala la OMS.
5. Reduces el riesgo de osteoporosis
Consumir una dieta baja en sal te ayuda a cuidar la salud ósea. El calcio es importante para la fortaleza de los huesos, demasiada sal puede provocar su debilitamiento y con ello osteoporosis. El exceso de sodio aumenta la cantidad de calcio en la orina.
6. Podrían disminuir tus dolores de cabeza
Los resultados de un estudio revelaron que quienes consumían alimentos con bajo contenido de sodio tenían menos dolores de cabeza que los que consumían alimentos con mayor contenido de este mineral.
Esto significa que reducir el consumo de sal puede ayudar a prevenir los dolores de cabeza.
7. Reconocerás más sabores
Al principio podrías sentir la ausencia de sal en tu comida, pero con el tiempo tus papilas gustativas se irán adaptando, descubrirás y apreciarás lo apetitoso que son tus alimentos sin ella. Reconocerás una gama más amplia de sabores naturales.
El disminuir el consumo de sal beneficia tu salud y paladar. Realízalo de manera gradual, usa hierbas y especias para condimentar tus alimentos.
Te puede interesar: