Sidra de manzana: beneficios para la salud y cómo hacerla fácilmente

Sabrosa bebida fermentada que favorece tu salud intestinal

Sidra de manzana

La sidra de manzana no es lo mismo que jugo de manzana. Crédito: cottonbro | Pexels

La sidra de manzana es probiótica y ofrece distintos beneficios a tu salud. La sabrosa bebida fermentada está repleta de bacterias, vitaminas y polifenoles pueden ayudar a restaurar la flora intestinal y mejorar la función digestiva.

La sidra está hecha de jugo de manzana crudo. De acuerdo a Live Strong, los frutos se trituran y prensan en frío para luego dejar que se fermente hasta por tres semanas y luego se deja madurar durante varios meses.

Una sidra dulce y suave la obtienes en tres o cuatro días; es el tipo de sidra que te enseñaremos a hacer.

La sidra de manzana destaca por un alto contenido en LAB, o bacterias del ácido láctico, como Lactobacillus brevis, Lactobacillus casei, Leuconostoc mesenteroides y Oenococcus oeni.

La bebida es rica en vitamina C y antioxidantes, especialmente compuestos polifenólicos que contiene la manzana. La fruta es rica en fitoquímicos (quercetina, catequina, ácido clorogénico, antocianina).

Los polifenoles y los fitonutrientes de las manzanas tienen efectos cardioprotectores, antiinflamatorios y antioxidantes, según describe la Escuela de Salud Pública de Harvard (HSPH).

Distintos tipos de sidra

Dependiendo del grado de dulzor, la sidra puede ser dulce, seca, semiseca o extra seca.

Hay sidra de manzana alcohólica y sin alcohol. A la bebida sin alcohol se le puede encontrar como  “sidra” o “soft cider”.  La fermentación convierte todos los azúcares de la sidra en alcohol; por tanto, esta sidra ya no será dulce al beber, es sidra alcohólica seca o dura.

Jugo de manzana y sidra de manzana no son lo mismo

Es importante mencionar que a veces, en ciertos lugares como Australia y Norteamérica también llaman sidra al jugo de manzana sin fermentar.

La sidra se produce cuando las manzanas crudas se trituran y se presionan para extraer el líquido. No se filtra. Esto hace que la sidra parezca turbia, ya que contiene pulpa y sedimentos. Es más ácida y contiene más flavonoides que el jugo de manzana.

El jugo de manzana se ha filtrado para eliminar los sólidos y se ha pasteurizado para que permanezca fresco por más tiempo, lo que elimina la mayoría de los flavonoides y fibras, explica la HSPH.

Cómo hacer sidra de manzana

Ingredientes: 2 kilos de manzanas

1. Lava y hierve los frascos o botellas de vidrio que se usarán para contener el jugo de manzana exprimido.

2. Descorazona y corta las manzanas con piel previamente lavadas, luego procésalas en una picadora de alimentos, licuadora o procesador.

3. Coloca la pulpa de manzana triturada en un saco de muselina, y exprime el jugo. También puedes pasar la mezcla por un tamiz o colador muy fino.

4. Deja reposar el jugo a 72 grados Fahrenheit durante 3 a 4 días. Las botellas limpias deben llenarse justo por debajo del borde y taponado con tapones de algodón nuevos y limpios en lugar de una tapa o tapón regular. El tapón de algodón se utiliza por seguridad.

Asegúrate de usar botellas de vidrio fuertes y sólidas que no se rompan durante la fermentación.

Si se acumula presión durante la fermentación, el algodón saldrá y liberará la presión.

Después de 3 o 4 días, el sedimento comenzará a asentarse a medida que las burbujas de fermentación suben.

5. Si quieres sidra dulce y suave, es momento de detener la fermentación. Extrayendo el líquido transparente. Guarda en una botella dejando ½ pulgada de espacio libre para la expansión.

¡Listo! Ya tienes tu sidra de manzana.

El Centro Nacional para la Conservación de Alimentos en el Hogar de la Universidad de Georgia recomienda que los niños pequeños, los ancianos y las personas con su sistema inmunológico debilitado no deben beber sidra de manzana a menos que se haya pasteurizado para eliminar bacterias dañinas.

Para pasteurizar, calienta la sidra al menos a 160 grados Fahrenheit y 185 grados Fahrenheit como máximo.

Guarda la sidra en el refrigerador para su uso inmediato o hasta por 5 días. Si quieres conservar la bebida por más tiempo también la puedes congelar.

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