4 errores al comer frijoles y legumbres que no te ayudan a bajar de peso

Hoy en día todos queremos alimentarnos de manera más saludable. Se sabe que es la más fiel herramienta para vivir mejor, por más tiempo y prevenir enfermedades. Con base en ello existen valiosos ingredientes que deben de formar parte de toda dieta equilibrada, tal es el caso específico de las legumbres que en los últimos meses han tomado un lugar muy especial en las tendencias de nutrición y salud. Sobre todo al tratarse de una gran alternativa para aquellas personas que siguen una dieta basada en plantas. 

El mundo de las legumbres es extenso, sin embargo los frijoles resultan una magnífica opción. De hecho se cuenta con referencias que avalan sus beneficios para la salud y especialmente de pérdida de peso. Lo cierto es que los frijoles son buenos para todo, en principio llama la atención su destacada composición nutricional, que brilla por su contenido en proteínas vegetales que contienen la mayoría de los aminoácidos. De hecho se cuenta con datos en los que se confirma que una taza aporta casi el 30% de las proteínas diarias que el cuerpo necesita.

Los frijoles también se destacan por su alto contenido en fibra, que en conjunto con las proteína crean una potente combinación saciante que es de gran ayuda para sentirte satisfecho consumiendo mucho menos comida. Además según un estudio que fue publicado en The American Journal of Clinical Nutrition, encontró que el simple hecho de agregar frijoles a la dieta (sin tratar de reducir las calorías) puede ser de gran ayuda para perder grasa corporal. Si bien siempre serán una magnífica adición dietética, existen algunas recomendaciones de los más expertos nutricionistas para consumirlos y potenciar la pérdida de peso. Toma nota y empieza por integrarlos de manera generosa en tu dieta, notarás magníficos beneficios.

1. Los frijoles no deberán de ser la única fuente de proteína

Los frijoles son muy ricos en proteínas de origen vegetal y una magnífica adición a la dieta. Sin embargo no proporcionan los aminoácidos esenciales que el cuerpo necesita (los aminoácidos son los componentes básicos de las proteínas y los “esenciales” son, esenciales porque nuestro cuerpo no puede producirlos y los obtenemos a través de los alimentos). Lo que sucede es que suelen ser bajos en metionina, un aminoácido que está presente en cantidades más altas en los granos. Los frijoles proporcionan cantidades más altas de lisina, que está limitada en granos. Por esta razón, se recomienda emparejar los frijoles con granos, con el objetivo de formar una proteína completa, el claro ejemplo serían: frijoles y arroz. Recuerda que el hígado almacena aminoácidos esenciales durante el transcurso de un día para su uso posterior, por lo que siempre que obtengas un suministro adecuado de aminoácidos esenciales dentro de un período de 24 horas, será suficiente y te mantendrás muy satisfecho. 

2. Cuidado con los frijoles enlatados

Siempre será importante recurrir a las fuentes de alimentos naturales. Y en el caso de los frijoles la recomendación es latente, es importante evitar el consumo de frijoles enlatados, finalmente son alimentos procesados y envasados, pero sobre todo por su alto contenido en sodio. Según los datos de la Asociación Estadounidense del Corazón, más del 70% del sodio que consumimos proviene de estos alimentos y se asocia con graves afecciones en la salud cardiovascular. Los frijoles entran en la categoría de alimentos envasados, cabe mencionar que no todas las alternativas son malas, por lo tanto es demasiado importante leer la información nutricional de las latas y podrás ver que el recuento de sodio varía. Según información de la USDA algunas variantes no tienen absolutamente nada de sodio, mientras que otros aportan más de 1,000 miligramos en una lata. Si te preguntas qué tiene esto que ver con su potencial para estimular la pérdida de peso, tiene mucha relación. Al consumir una excesiva cantidad de sodio, el cuerpo va retener más agua y esto causará hinchazón y en muchos casos aumento de peso. De tal modo que consumir frijoles naturales o versiones orgánicas con cero sodio, le hará un favor a tu corazón y cintura. 

3. Agregar o mezclarlos con lácteos

Es importante consumir los frijoles y legumbres en general, previamente remojados y en su presentación más natural posible. Se recomienda agregar hierbas de olor frescas, para evitar el uso de sal como condimento. De igual manera se aconseja evitar mezclarlos con lácteos, ya que en muchas ocasiones son ricos en grasas saturadas y suelen añadir calorías innecesarias. Por el contrario se aconseja acompañarlos con algunos granos, aguacate, vegetales y complementar con un poco de aceite de oliva, de esta manera obtendrás un plato muy nutritivo saludable y bajo en calorías. Lo mejor de todo es que las legumbres preparadas al natural y sin alimentos calóricos adicionales son perfectas para acelerar el metabolismo, a la vez estos complementos serán de gran ayuda para promover el consumo de comidas basadas en plantas.

4. No agregar grasas saludables

Los frijoles y las legumbres, son maravillosos para crear todo tipo de ricas y generosas combinaciones. Es importante mencionar que las legumbres son ricas en grasas insaturadas y también ricas en proteínas, por lo tanto aportan energía de la más alta calidad en nuestro día a día. Los frijoles al ser bajos en grasas, se prestan perfecto para integrar un extra de grasas saludables en la dieta, que sin lugar a dudas aumentan el potencial nutricional diario. Es importante mencionar que el consumo de grasas saludables, se relaciona con grandes beneficios para cuidar la salud cardiovascular y también son un gran aliado para estimular positivamente al metabolismo y así acelerar la quema de calorías. Apuesta por agregar aceite de oliva, frutos secos, semillas, aguacate y aceite de aguacate.

Recuerda que los frijoles tienen un índice glucémico muy bajo. Son recomendables para los diabéticos ya que ayudan a mantener los niveles de azúcar en sangre más estables. También son alimentos muy versátiles, accesibles y muy saciantes, el aliado perfecto para controlar el apetito. Ayudan a reducir el hambre y promueven la pérdida de peso ¿Qué esperas para comer más frijoles? Y ver como esas libras extras desaparecen.