Cáncer de próstata: 4 alimentos que vale la pena evitar para prevenirlo
El cáncer de próstata es el más frecuente en los hombres y se ha posicionado como la segunda causa de muerte en la población masculina, se sabe que el estilo de vida y la calidad de la dieta influyen significativamente en su aparición. Estos son los peores grupos de alimentos que deterioran el funcionamiento de la próstata y aumentan el riesgo de cáncer
El cáncer es la segunda causa principal de muerte en humanos en el mundo, no en vano es una de las enfermedades mortales más preocupantes hoy en día. Es causada cuando las células se dividen sin control y se diseminan a los tejidos circundantes, también se refiere a una gran cantidad de enfermedades caracterizadas por el desarrollo de células anormales que tienen la capacidad de infiltrarse y destruir el tejido corporal normal. Si bien existen muchos factores que pueden aumentar el riesgo de padecer cáncer, es bien sabido que la mayoría son causados por el estilo de vida y factores como el tabaquismo, el sobrepeso y la obesidad, la dieta, el nivel de actividad física, el sol y otros tipos de radiación, los virus y otras infecciones. El año pasado, el cáncer de próstata se posicionó como una de las principales causas de muerte registradas en la población masculina. Con un número estimado de casi 1,4 millones de casos y 375.000 muertes en todo el mundo, se ha posicionado como el segundo cáncer más frecuente y con mayor número de víctimas mortales.
Por fortuna si se detecta en las primeras etapas, es bastante tratable. También los expertos han confirmado que a través de la alimentación es posible prevenirlo y disminuir el riesgo, es por ello que cada día son más los hombres interesados en ajustar sus hábitos cotidianos. De manera particular, la dieta mediterránea se ha posicionado como una de las mejores pautas dietéticas contra el cáncer de próstata. De hecho, según un nuevo estudio del Centro Oncológico M. D. Anderson de la Universidad de Texas: los hombres con cáncer de próstata que siguen una dieta mediterránea más estricta pueden experimentar un menor riesgo de progresión. El estudio contó con la participación de 410 hombres con cáncer de próstata, a quienes según un cuestionario de frecuencia alimentaria se les asignó una puntuación alta, media o baja en la dieta mediterránea. Los investigadores encontraron que los participantes masculinos que comían más frutas, verduras, granos, pescado, aceite de oliva, nueces, legumbres, frijoles y semillas. Es decir los 9 grupos de alimentos básicos de la dieta mediterránea, tuvieron menores síntomas y progresión en la enfermedad.
El Centro Médico de la Universidad de California en San Francisco, ha declarado que es posible prevenir el cáncer de próstata o retrasar su progresión, a través de algunas medidas como: un bajo consumo de grasas saturadas y azúcares simples, alta ingesta de fibra, frutas y verduras. También será igual de importante concentrarse en evitar ciertos tipos de alimentos, estos son los 4 grupos de alimentos que más deterioran el buen funcionamiento de la próstata.
1. Carnes rojas y procesadas
No es ninguna novedad decir que los hombres aman comer carne y embutidos, sin embargo su consumo recurrente se asocia con un mayor riesgo de desarrollar cáncer de próstata. Se cuenta con estudios en los que se asocia la ingesta de este tipo de carnes (sobre todo cuando están bien cocidas) con una sustancias altamente cancerígena llamadas aminas heterocíclicas (HCA), las cuales se han relacionado con el desarrollo de varios tipos de cáncer. Los HCA son compuestos que se forman durante la cocción a alta temperatura, como asar o asar a la parrilla. Además complementario a ello se cuenta con referencias de la Organización Mundial de la Salud, las cuales sugieren que las siguientes variantes de carnes rojas y procesadas aumentan el riesgo de cáncer de próstata: carne de vaca, carne de cerdo, fiambres, tocino, salchichas y tocino. Por el contrario se recomienda la ingesta de carnes magras como el pavo, pollo sin piel, pescados grasos: salmón, atún y sardinas. Y algunas fuentes de proteínas vegetales como los frijoles y nueces: guisantes, garbanzos, lentejas, frijoles de diferentes variedades, y frutos secos, como las almendras, pistaches, piñones y nueces. Una gran recomendación de los especialistas es apostar por seguir una dieta basada en plantas entre semana y consumir pequeñas porciones de carne orgánica en ocasiones especiales, como es el caso de los fines de semana.
2. Lácteos
No todos los lácteos son iguales, sin embargo se saber que un alto consumo de este tipo de productos (sobre todo los más ricos en calorías y grasas), puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de próstata. Tal es el caso de un trabajo de investigación publicado en el Journal of Nutrition, el el cual se comprobó que beber leche entera puede aumentar el riesgo de progresión al cáncer de próstata fatal. También se sabe que las leches descremadas y bajas en grasa en exceso, también aumentan el riesgo de etapas de bajo grado de la enfermedad. Por lo tanto la recomendación es contundente y nos invita a limitar su consumo, además los expertos aconsejan apegarse a las variedades sin grasa y en general comer menos quesos, yogurt y mantequilla enteros, así como el queso crema y el helado. Como buenas alternativas se encuentran las versiones bajas en grasa o mejor aún las alternativas de productos de origen vegetal como la leche de avena, arroz, almendras, cáñamo, soja, coco y anacardo. La única recomendación es evitar las variantes endulzadas.
3. Alcohol
El consumo de grandes cantidades de alcohol puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de próstata y deteriorar la salud en numerosos aspectos. Se cuenta con un estudio, en el cual los investigadores utilizaron datos de más de 10,000 hombres que participaron en el ensayo de prevención del cáncer de próstata. Y descubrieron que los bebedores empedernidos tenían el doble de probabilidades de ser diagnosticados con cáncer de próstata avanzado, en comparación con los bebedores moderados ¿Quiénes están catalogados como grandes bebedores? Aquellos hombres que consumen más de tres tragos al día o más de 20 tragos a la semana. Para mayor claridad vale la pena recordar las recomendaciones actuales para los hombres, las cuales aconsejan no excederse de más de dos bebidas alcohólicas por día. Una sola bebida equivale a:
– 12 onzas de cerveza normal (5% alcohol)
– 5 onzas de vino (12% alcohol)
– 1.5 onzas de licor fuerte (40% alcohol)
4. Grasas saturadas
No podemos irnos sin hablar de uno de los grupos de alimentos más preocupantes: las grasas saturadas. Las cuales popularmente se relacionan con enfermedades cardíacas, sin embargo nuevas referencias las asocian directamente con un mayor riesgo de cáncer de próstata. Por lo tanto reducir la ingesta de grasas saturadas puede beneficiar a la próstata y salud en general, además abre la puerta a un estilo de vida y alimentación más saludable que se base en un alto consumo de alimentos densos en nutrientes, antioxidantes y fibra. A grandes rasgos los alimentos más ricos en grasas saturadas son: carne, productos lácteos, aderezos para ensaladas, bollería industrial, todo tipo de alimentos procesados. La mejor recomendación es apostar por el consumo de grasas saludables, monoinsaturadas y poliinsaturadas que se encuentran en alimentos tales como: pescados grasos, aguacate, nueces, aceite de oliva y semillas.
Comidas procesadas. /Foto: Shutterstock
—
Te puede interesar: