Gana 220 libras durante la pandemia por pedir comida a domicilio todos los días
Y no solo su mal hábito adquirido durante la cuarentena le ha traído consecuencias a su salud sino también a su bolsillo, pues en promedio gasta $800 al mes en comidas
El chico pide de 5 a 6 servicios de delivery food todos los días. Crédito: Shutterstock
No cabe duda que la pandemia del coronavirus nos vino a cambiar la vida por completo. Prácticamente, tuvimos que adaptarnos a vivir las 24 horas del día dentro de casa, haciendo nuestras labores diarias y cambiando drásticamente algunos de nuestros hábitos para sobrevivir.
Uno de los servicios que ha tenido un gran auge por el tema de la pandemia es el delivery o bien, el servicio a domicilio, en particular de comida, ya que suele ser complicado hacer múltiples tareas a diario como para todavía tener que preocuparnos por el tema de la cocina.
El problema está que generalmente, la comida a domicilio que está alcance de todos y la llamada fast food, por lo que no es de extrañarse que en este último año hayas ganado unas cuantas libras.
Sin embargo, lo vivido por un hombre en China da mucho qué pensar respecto a todo el año que puede acarrearnos esta costumbre adquirida en tiempos de pandemia.
Xiao Li asegura haber ganado un poco más de 220 libras (100 kg) en los últimos meses debido a que pide comida a domicilio de 5 a 6 veces, todos los días, optando generalmente por platillos altos en calorías.
Según medios locales, Xiao mide 1,80 metros y antes de la pandemia pesaba 198 libras (90 kg), lo cual ya estaba arriba de su peso óptimo; sin embargo, no le habría traído ninguna consecuencia a su salud.
Pero la pandemia hizo que este hombre cambiara radicalmente sus hábitos alimenticios pues comenzó a pedir comida a casa, varias veces en el día, eligiendo generalmente bowls de arroz, noodles de carne, pollo a la plancha y frito, arroz frito y otros, todas estas comidas con un alto índice de calorías.
Según medios locales, Xiao gasta cerca de $800 dólares mensuales en sus pedidos, aunque en ocasiones la cifra se va al doble.
Actualmente, el peso de Li le ha traído consecuencias físicas, ya que se siente incómodo y no puede dar un paso sin sofocarse. Esto lo ha obligado a pasar la mayor parte del día sentado, acostado y comiendo.
Se ha calculado que este hombre aumenta unas 13 libras (6 kg) cada mes y por ende, debe de usar un ventilador por las noches para no ahogarse mientras duerme.
Li ha tratado de perder peso yendo a algunos campamentos de entrenamiento, pero dada su condición le es prácticamente imposible aguantar el ritmo y vuelve fácilmente a sus malos hábitos.
Ahora, su única oportunidad de volver a ser quien era es que un doctor especialista en esta problemática se ha ofrecido a realizarle una cirugía para que pueda perder peso.
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