Estados Unidos donará 500 millones de vacunas contra coronavirus adicionales a países pobres
Las dosis de Pfizer se sumarán a otros 600 millones donadas por los Estados Unidos a más de 100 países, incluidos sus aliados como México y naciones de Centroamérica
En el encuentro sobre la pandemia de COVID-19, el Gobierno del presidente Joe Biden anunció varias acciones para ayudar a los países con menos recursos a enfrentar el problema de salud, incluida la donación de otros 500 millones de vacunas, lo que sumaría 1,100 millones en total.
La Casa Blanca confirmó que serán dosis de Pfizer-BioNTech las que serpan enviadas a países de “ingresos medios y bajos”, a partir de enero del 2022.
“Este compromiso monumental eleva el número total de vacunas donadas… a más de 1,100 millones de dosis, incluidas los 500 millones de dosis de Pfizer-BioNTech que EE.UU. ya compró en junio y comenzó a enviar en agosto”, se indicó.
Esto significa que, por cada tres dosis de vacunas que se aplicaría en los países beneficiados, una habría sido donada por la Administración Biden.
“Hasta la fecha, EE.UU. ya ha enviado casi 160 millones de dosis a 100 países”, destaca el reporte, donde también se apunta que es el país con más donaciones.
Adicional a ello, a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), se planea proporcionar $370 millones de dólares adicionales para la preparación de vacunas a nivel mundial.
La Corporación Financiera Internacional para el Desarrollo (DFC) proporcionará más de $383 millones de dólares en seguros de riesgo político a Gavi la Alianza de Vacunación, para facilitar los envíos de dosis a nueve países en tres continentes.
Presión a otros países
La Administración Biden hizo un llamado a los países, fabricantes de vacunas y otros socios para expandir la producción global y regional de dosis. Eso incluiría mayor transparencia sobre producción y distribución.
“Estados Unidos insta a los fabricantes de vacunas a que pongan a disposición del público la información sobre el suministro y la distribución de vacunas, de modo que los países y los socios mundiales puedan planificar cómo solventar los faltantes y priorizar las entregas de vacunas donde se necesitan con mayor urgencia”, considera.
El Gobierno estadounidenses reiteró su apoyo a que se liberen temporalmente las patentes de las vacunas, a fin de facilitar su producción.
Otras amenazas
Al retomar el discurso del presidente Biden ante las Naciones Unidas, la vicepresidenta Kamala Harris indicó en el encuentro sobre la pandemia, realizado en forma virtual desde la Casa Blanca, que el mundo debe prepararse para otras amenazas biológicas.
“Mi enfoque hoy es hablar sobre lo que debemos hacer para prepararnos para la próxima (pandemia)”, dijo Harris. “Poner fin a esta pandemia y prepararnos para la próxima es un imperativo estratégico. Es esencial para nuestra seguridad y nuestra prosperidad compartida”.
Harris insistió en que el mundo “no está completamente preparado para prevenir, detectar y responder a futuras amenazas biológicas”, por lo que es necesario establecer nuevas estrategias.
El presidente Biden también participó en el encuentro, así como el encuentro, así como el secretario de las Naciones Unidas, António Guterres; el director general de la OMS, Dr Tedros Adhanom Ghebreyesus; los primeros ministros de de Canadá, Justin Trudeau, e Inglaterra, Boris Johnson, así como Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.