Se acerca el momento en que personal escolar y sanitario de NY pueden perder sus trabajos si no están vacunados contra el COVID-19
A pesar de presiones sindicales e intentos judiciales, el próximo lunes 27 de septiembre todos los trabajadores de escuelas públicas de la Gran Manzana deben tener la inyección para poner un pie en los planteles. La misma política se aplica a la fuerza laboral hospitalaria de NY
La Ciudad de Nueva York tiene allanado el camino y está liberada de los primeros intentos judiciales que pretendían poner un muro al mandato de vacunación que entra en vigencia el próximo lunes 27 de septiembre, el cual obliga a todos los maestros y el personal escolar de los planteles públicos que tengan al menos una dosis de la vacuna contra el COVID-19 para poder asistir a los planteles.
En paralelo, ese mismo día, entra en efecto la orden de inoculación obligatoria del ex gobernador Andrew Cuomo dirigida a todo el personal de hospitales públicos y privados, ancianatos y otros centros de atención sanitaria, la cual fue ratificada este jueves por la mandataria estatal Kathy Hochul, en medio de la resistencia de los sindicatos y la posibilidad de que profesionales de la salud, negados a los fármacos, abandonen sus unidades de atención.
En este punto de los respectivos mandatos de inmunización, al personal escolar de la Gran Manzana y al sanitario del estado de Nueva York, al menos entre el 18% y 20% en promedio de estas masas laborales esenciales, se siguen negando a la orden.
Pese a los intentos de agrupaciones sindicales para bloquear la medida, este miércoles el juez Laurence Love de la Corte Suprema del estado de Nueva York levantó una orden de restricción temporal que había puesto una pausa a al mandato de inmunización emitido por el Alcalde Bill de Blasio que alcanza al personal de las escuelas públicas.
“Los tribunales estatales y federales han sostenido sistemáticamente que el requisito de una vacuna obligatoria no viola los derechos sustantivos del debido proceso y está debidamente dentro de las competencias del poder local”, dictó Love.
El juez citó la jurisprudencia que se remonta a 1905 que confirmó la autoridad del gobierno para exigir vacunas. Además precisó que será difícil para los sindicatos demostrar “daños irreparables” como resultado del mandato, o que sus intereses superan a los de la salud pública en general.
A diferencia del resto de la fuerza laboral municipal, los educadores no tienen la opción de hacerse la prueba semanalmente.
La política de obligatoriedad de la vacuna ordenada por De Blasio se aplica a todos los adultos que trabajan en edificios de escuelas públicas, incluidos maestros, administradores, consejeros, trabajadores de la cafetería, conserjes, agentes de seguridad escolar y empleados contratados.
“Esta es una gran victoria para los niños de la ciudad de Nueva York y los empleados del Departamento de Educación”, dijo la portavoz del Departamento de Educación (DOE), Danielle Filson a medios locales.
Sindicatos seguirán resistiendo
En reacción, Héctor Garrido, director ejecutivo de la Unión del Consejo del Distrito 37, una de las organizaciones demandantes aseguró: “este no es el final del camino”.
“Estamos profundamente decepcionados de que se haya levantado la medida cautelar temporal. Continuaremos luchando por el derecho de los trabajadores a tomar sus propias decisiones de atención médica ”, dijo en comunicado el líder sindical.
Garrido agregó que la mayoría de sus miembros están vacunados y pidió a la Ciudad que restablezca una opción para que el personal de la escuela tome una prueba de coronavirus semanal, en lugar de poner al personal escolar contra la pared.
En esa misma dirección, el abogado Allen M. Klinger dijo que los grupos laborales que él representa “no son anti-vacunas”, y agregó que muchos líderes sindicales han alentado a sus miembros a inyectarse. Precisó que este mandato viola “la integridad corporal” de los empleados, que pueden someterse a “una inyección forzada o perderás tu trabajo”.
En la audiencia de la Corte, la abogada representante de la Ciudad de Nueva York, Kimberly Brown, manifestó que el desafío de los sindicatos “no tiene mérito”.
A juicio de la jurista, el mandato se alinea con la recomendación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) que indica que todo el personal escolar se vacune lo antes posible.
En su presentación judicial, la Alcaldía argumentó que el mandato está impulsado por “potencialmente salvar vidas, proteger la salud pública y promover la seguridad pública”.
¿Qué pasa ahora con el personal escolar?
A pesar del mandato firme de la Ciudad, solo quien califique puede solicitar excepciones médicas y religiosas. Quienes se nieguen por una decisión personal no razonada, ni respaldada, tienen dos opciones: o tomar una licencia sin goce de sueldo mientras mantienen su seguro médico, podrían ser despedidos o simplemente tendrán que renunciar.
Según fuentes del DOE hasta este miércoles de los 78,000 maestros en total que están contratados por la Ciudad, 67,860 han recibido al menos una dosis de los fármacos. Es decir, que estarían rezagados hasta la fecha por lo menos 10,140.
Alerta en los hospitales
La gobernadora Kathy Hochul este jueves en una sesión informativa recordó a los trabajadores del sistema hospitalario estatal “que tienen plazo” hasta el próximo lunes 27 de septiembre a vacunarse, despejando cualquier duda sobre la posibilidad de que esta medida fuese, a lo menos, pospuesta.
“Estamos enviando una llamada a todo el estado. Hay instalaciones, por ejemplo en la ciudad de Nueva York, donde el 98% de su personal está vacunado. No es cierto que hay escasez de trabajadores. Estamos chequeando de manera rigurosa lo que pasa en todos estos centros “, acotó la mandataria.
Esta petición de la mandataria se realiza en medio de presiones sindicales, querellas judiciales en curso y el riesgo de que se genere una crisis de personal en hospitales del estado por grupos de profesionales de la medicina y personal de salud que se niegan radicalmente a ponerse la inyección contra el coronavirus.
“Para aquellos que se nieguen, encontraremos reemplazos“, dijo Hochul a principios de esta semana.
En contraparte, miembros de la Federación de Empleados Públicos (PEF), han razonado al diario Times Union que ese mandato de inmunización podría provocar que miles de enfermeras no vacunadas y otros trabajadores de atención médica de primera línea, enfrenten la suspensión, o el posible despido en hospitales estatales que ya tienen fallas de personal.
“No existe una talla única para todos, y el estado está haciendo una talla única para todos”, explicó Wayne Spence de PEF al medio neoyorquino.
El presidente de la United University Professions (UUP), Frederick E. Kowal, puntualizó que alrededor de un tercio de los miembros de ese sindicato, más de 13,000 empleados en tres grandes hospitales y sus instalaciones médicas relacionadas, se ven afectados por el mandato.
De este grupo se estima que el 10% no está vacunado.
“Queremos trabajar con el gobernador y maximizar el número de personas vacunadas. Creemos que los incentivos, el asesoramiento, el trabajo con los miembros que no están vacunados, es una forma de atraer a la gente y lograr el objetivo”, concluyó el dirigente sindical.
Quienes reclaman una exención por razones religiosas están libres de responsabilidad hasta al menos el 12 de octubre, debido a una orden de restricción temporal emitida por un juez federal de Utica (NY) después de que 17 trabajadores de la salud presentaran una demanda de libertad religiosa.
Más del 80% inmunizados
- 20% de los trabajadores en hospitales y hogares de ancianos de Nueva York que aún se niegan a inocularse contra el COVID-19 podrían ser reemplazados, una vez que el mandato del estado entre en vigencia el próximo lunes, alertó la gobernadora Kathy Hochul.
- 19% de los trabajadores de hospitales de Nueva York no se han inmunizado, según cifras del Departamento de Salud del estado con base a estadísticas acumuladas hasta el pasado 15 de septiembre.
- 18% es el porcentaje de no vacunados en los centros de cuidado prolongado de ancianos.
- 87% de los maestros de la ciudad de Nueva York fueron inyectados con base a números del DOE.
- 80% del personal escolar obligados a la vacuna ha recibido al menos una dosis, eso significa un grupo de personas que alcanza las 29,600 personas en los cinco condados.