Ivanka Trump y su esposo Jared Kushner disfrutan Miami “de lo lindo” con sus hijos lejos de la Casa Blanca
Ivanka Trump y Jared Kusher fueron captados en Miami disfrutando un parque acuático con sus tres hijos; hay reportes que indican que la pareja no piensa volver a la política tras su paso por la Casa Blanca; la pareja planea construir una mansión en Florida
Jared Kushner e Ivanka Trump no piensan volver a la política, según reportes. Crédito: Alex Wong | Getty Images
Lejos de los reflectores políticos, Ivanka Trump y su esposo, Jared Kushner, disfrutan de Miami, Florida, al lado de sus hijos, donde fueron captados muy amorosos.
El reporte señala que Ivanka, de 39 años, lucía un bikini morado estampado con capas de un ojal blanco, que complementó con una bufanda rosa en el cabello y unas gafas de sol.
Su esposo disfrutaba de la alberca y en un momento ambos fueron captados dándose un beso, mientras que sus niños Arabella, Joseph y Theodore se divertían cerca en el parque acuático.
La pareja, quien habría logrado millonarios ingresos durante su estancia en la Casa Blanca, se mostró despreocupada.
Hay reportes de que ni Ivanka ni Jared quieren volver a la política, pero su paso por Washington, D.C. todavía podría depararles sorpresas, ya que hay libros donde son mencionados.
El más reciente es el libro de quien fuera porrtavoz de Melania Trump y de la Casa Blanca, Stephanie Grisham, afirma que la exprimera dama temía que los hijos de Donald Trump lo avergonzaran en una visita que hicieron a Inglaterra, donde se reunieron con la Reina Isabel.
Ivanka dejó muy mala fama en Washington, D.C., un reciente reporte de Mother Jones, reveló que la hija del expresidente habría afirmado que no participó en la organización de eventos inaugurales de su padre, pero correos electrónicos revelan justamente lo contrario.
En febrero, Donald Trump Jr. fue depuesto en la demanda por el escándalo de la inauguración y bajo juramento brindó falso testimonio, según un reporte publicación que ahora muestra una práctica similar de Ivanka.
La investigación comenzó en 2020 por Karl Racine, el fiscal general de Washington, D.C., quien ha alegado que el comité de toma de posesión de Trump hizo un mal uso de fondos caritativos para enriquecer a la familia Trump.
