Colesterol alto: beber leche de soja a diario ayuda a bajarlo
Para evitar el riesgo de problemas cardíacos, es importante reducir los niveles de LDL y aumentar los niveles de HDL. Recientemente un metanálisis demostró que la leche de soja, es una de las mejores alternativas naturales para disminuir el colesterol malo, aumentar el bueno, limpiar las arterias y proteger la salud cardíaca
El colesterol alto es uno de los diagnósticos más recurrentes en la consulta médica y es el antecedente por excelencia de diversas enfermedades cardiovasculares, además es una afección que deteriora significativamente la calidad de vida. Es bien sabido que se relaciona estrechamente con el estilo de vida y la calidad de la dieta, de tal modo que así como existen alimentos ricos en grasas saturadas que son activos detonantes; otros brillan por sus propiedades hipoglucemiantes. Recientemente, de acuerdo con un metánalisis las formas menos procesadas de soja, como es el caso particular de la leche de soja, es una de las alternativas más efectivas para disminuir de manera natural los niveles de colesterol “LDL” popularmente conocido como malo.
El colesterol (una sustancia cerosa que se encuentra en la sangre) no es intrínsecamente malo; de hecho el cuerpo cuerpo lo necesita para desarrollar células sanas. Sin embargo, cuando el colesterol es demasiado alto puede aumentar el riesgo de sufrir un ataque cardíaco. Lo hace mediante el desarrollo de depósitos de grasa en los vasos sanguíneos. Estos depósitos de grasa crecen, lo que dificulta cada vez más que fluya suficiente sangre a través de las arterias. Eventualmente, las arterias pueden bloquearse, privando al corazón de sangre y oxígeno, condiciones que desencadenan un ataque cardíaco.
Es importante distinguir entre los diferentes tipos de colesterol, ya que cada uno de ellos desempeña funciones diferentes. El colesterol LDL es el tipo “malo” que obstruye las arterias, mientras que el colesterol HDL es el tipo “bueno”, este transporta el colesterol de otras partes de su cuerpo al hígado, donde lo elimina.
La dieta es la clave para lograr este equilibrio y ciertos elementos han demostrado ser particularmente útiles. Y la soja resulta particularmente benéfico: la soja, es un alimento vegetal de alto contenido proteico y contiene isoflavonas, que son compuestos de origen vegetal que son similares en estructura al estrógeno. La investigación ha encontrado que la proteína de soja y las isoflavonas tienen poderosos efectos reductores del colesterol y tienen el poder de reducir su riesgo de enfermedad cardíaca.
De manera más específica se demostró que comer soja todos los días, durante al menos un mes puede aumentar el colesterol HDL en 1.4 mg/dL y reducir el LDL “malo” en aproximadamente 4 mg/dL, según muestra una investigación. Lo más importante es recurrir al consumo de las formas menos procesadas de soja, por encima de los extractos o suplementos de proteína de soja procesada: la leche de soja es probablemente la opción más efectiva.
Además, los investigadores fueron enfáticos en los beneficios que aporta de manera general el consumo de productos de soja a la dieta. Ya que son una maravillosa fuente de proteínas de origen vegetal, son bajos en calorías y saciantes. Son una buena alternativa para las personas que presentan intolerancias a la lactosa y que se muestran interesadas en seguir una dieta basada en plantas.
Se ha demostrado a través de diversos estudios científicos que la soja es un alimento con grandes propiedades cardioprotectoras, en particular mejora el funcionamiento del corazón y del sistema circulatorio. Además beneficia el control de la hipertensión y glucosa en sangre. Se asocia con cualidades para regular el equilibrio hormonal, disminuye los síntomas de la menopausia, promueve la pérdida de peso y ayuda a prevenir la osteoporosis. Es un maravilloso alimento para fortalecer al sistema inmunológico y disminuye el riesgo de contraer enfermedades e infecciones. Favorece la construcción y recuperación muscular.Los productos de soja son una excepcional fuente de fibra que beneficia la salud del sistema digestivo e intestinal, además ayudan a acelerar el tránsito intestinal y con ello promueven la sana eliminación de todo lo que el organismo no necesita.
De acuerdo con los expertos en salud del NHS, para lograr reducir el colesterol con éxito es importante reducir los alimentos grasos, especialmente los alimentos que contienen un tipo de grasa llamada grasa saturada. Generalmente, los alimentos con alto contenido de grasas saturadas incluyen:
– Empanadas de carne, embutidos y carnes grasas
– Mantequilla, manteca de cerdo y ghee
– Crema y queso duro, como cheddar
– Bollería industrial, como tortas, pasteles y bizcochos
– Alimentos que contienen aceite de coco o aceite de palma
Además es importante incrementar el consumo de alimentos ricos en grasas saludables, que son las del tipo “insaturadas”. Por lo tanto se recomienda aumentar el consumo de los siguientes alimentos:
– Pescado azul, como caballa, atún y salmón
– Arroz integral, pan y pasta, sin lugar a dudas la avena es una de las fuentes más recomendadas
– Nueces, semillas y aceites vegetales, con especial énfasis en el aceite de oliva extra virgen
– Frutas y vegetales, con especial énfasis en el aguacate
Así que ya lo sabes, la combinación de factores como el consumo de alimentos integrales y ajustes en el estilo de vida, como realizar actividad física, controlar el estrés, dormir bien, evitar el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo. Son aspectos que crean el escenario perfecto para disminuir el colesterol alto y el riesgo de afecciones cardíacas, además de proteger la salud y mejorar la calidad de vida en diversos aspectos.
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