“Soy alérgica al semen; me causa un dolor intolerable y parálisis”
Una estudiante de Colorado ha aprendido a vivir con su condición: es hipersensible al plasma seminal, un trastorno conocido comúnmente como alergia al semen
La alergia al semen es una condición extraña, pero que sí existe. Crédito: Unsplash
La hipersensibilidad al plasma seminal es un trastorno raro, pero real, y nada tiene qué ver con la calidad del semen. Se trata de una especie de alergia que sufren algunas mujeres sensibles a las proteínas del esperma. Una joven de Colorado, en Estados Unidos, narró su experiencia como una de estas mujeres alérgicas al semen, al punto que el contacto le causa un dolor intolerable y parálisis muscular.
Chloe Lowery es una estudiante de 18 años que se dio cuenta del problema desde la primera vez que tuvo contacto con el líquido seminal, pues su piel se enrojeció y sufrió una erupción, pero no le tomó mucha importancia. Pero cuando durante otro encuentro íntimo el lado derecho de su cara se paralizó, no tuvo más remedio que buscar atención médica.
Su doctor la diagnosticó entonces con hipersensibilidad al plasma seminal, una rara condición que desarrollan algunas mujeres que son sensibles a las proteínas comunes presentes en el esperma.
Síntomas de la alergia al semen
Una investigación de la Universidad de Antioquia, en Colombia, señala que este padecimiento es más frecuente en mujeres de entre 23 y 35 años, aunque también se reportan casos en menores de 20 y mayores de 50. La mayoría de ellas sólo han tenido un compañero sexual a lo largo de su vida.
Entre los síntomas más comunes de esta afección se encuentran quemazón, dolor e hinchazón vaginal, urticaria, eritema, edema y escozor vaginal, pero algunas también sufren dificultad para respirar (disnea), ruidos sibilantes, obstrucción nasal, prurito generalizado, tos, hinchazón facial, rinitis, ataques de asma, conjuntivitis, vómito, diarrea, debilidad, hipotensión, dolor en la pelvis con contracciones del útero y malestar general que culmina en algunos casos con pérdida de la conciencia.
En su caso, Chloe le narró a The Mirror que siente un ardor intenso en su zona genital después del encuentro sexual, como “un millón de agujas de acupuntura”, y aunque está aprendiendo a vivir con su rara condición, debe mantener algunos cuidados como el uso de preservativo o tratar de evitar al máximo el contacto directo con el semen.
Chloe cree que su padecimiento es más común de lo que pensamos, pero “simplemente creo que la gente lo confunde con otras cosas o tiene reacciones más menores que yo”, relató. “La gente ni siquiera cree que es algo importante porque es muy poco común o al menos no se habla de eso”, aseguró.
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