Biden enfrenta presiones para prohibir la importación de petróleo de Rusia; negocia con Venezuela
La Administración Biden está bajo presión creciente para prohibir a importación de petróleo de Rusia a los EE.UU., incluso ha abierto negociaciones con Venezuela, para posiblemente levantar el embargo comercial y suplir el llamado oro negro que deje de adquirir de los rusos, pero no hay una decisión tomada
El presidente Joe Biden debe decidir si detiene las importaciones de petróleo ruso. Crédito: Win McNamee | Getty Images
El Gobierno del presidente Joe Biden enfrenta presiones de legisladores para detener la importación de petróleo de Rusia, en medio de sus acciones a favor de Ucrania y las sanciones económicas a Rusia.
Sin embargo, el mandatario demócrata no ha tomado una decisión.
“El presidente no ha tomado ninguna decisión en este momento sobre la prohibición de importar petróleo de Rusia”, dijo la portavoz Jen Psaki en su conferencia de prensa.
En medio de las presiones, The Washington Post reveló que la Administración Biden negocia con el Gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para levantar el embargo del petróleo.
El sábado se reunió con Maduro y sus funcionarios una delegación estadounidense integrada por Roger Carstens, el enviado presidencial especial para asuntos de rehenes; Juan González, director senior de Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, así como Jimmy Story, el embajador de Estados Unidos en Venezuela.
La Administración de Información sobre Energía de EE.UU. reporta que en 2020 el país compró 7% del petróleo que se consume a nivel nacional, pero las cifras varían por año, ya que el Departamento de Energía señala que en 2021 el país compró 72.6 millones de barriles a los rusos, eso representa el 3.3% de las importaciones, dominadas desde Canadá con 61%.
El secretario de Estado, Antony Blinken, ha insistido en que continúan las negociaciones con los socios europeos sobre las prohibiciones de compra de gas y petróleo a Rusia.
“Estamos en discusiones muy activas con nuestros socios europeos sobre la prohibición de la importación de petróleo ruso a nuestros países mientras, por supuesto, al mismo tiempo mantenemos un suministro mundial constante de petróleo”, justificó Blinken en NBC News. “Las acciones que hemos tomado hasta la fecha ya han tenido un impacto devastador en la economía rusa”.
