El dominicano Cristian Javier ha sido el lanzador más dominante de Houston en la Postemporada
Los Astros de Houston igualaron la Serie Mundial ante los Phillies de Philadelphia con un histórico no hit no run combinado entre sus lanzadores. Asimismo, el dominicano Cristian Javier fue uno de los integrantes de este hecho y el derecho sigue graduándose como el mejor brazo de los siderales en la postemporada
Cristian Javier fue uno de los integrantes del no hit no run combinado de los Astros de Houston. Crédito: Sarah Stier | Getty Images
El mánager Dusty Baker, tiene en su róster a dos lanzadores que lideraron su rotación desde el primer día de temporada, hasta el último cuando preparaban su salto a una nueva postemporada gracias al banderín de la División Oeste de la Liga. Estos brazos fueron Justin Verlander y el dominicano Framber Valdez.
Sin embargo, en el momento más decisivo y en un nuevo Clásico de Otoño para los Astros de Houston, su “As” de su rotación sigue sin conocer la victoria y el siniestro si lo hizo en el segundo juego ante Phillies de Philadelphia.
En cambio, el alto mando del conjunto sideral ha tenido un as bajo la manga y ese es Cristian Javier, quien ha mantenido actuaciones solidas en esta postemporada para ser el líder de un pitcheo que ha sufrido el daño de los bates de Philadelphia.
Javier, en el cuarto choque de la Serie Mundial, maniató a la ofensiva de Bryce Harper y compañía por seis entradas completas. Durante este tramo no permitió imparables, otorgó un par de boletos y recetó a nueve bateadores.
De esta manera, el dominicano se convirtió en el primer lanzador desde 1969 en terminar una actuación en blanco en una Serie Mundial por seis entradas, demostrando que hasta ahora ha tenido una capacidad de dominio muy alta en esta instancia.
Ahora, el diestro de 25 años mantiene su efectividad en esta postemporada en 0.71 en tres presentaciones, dos de ellas como abridor de los Astros de Houston. Además, ha permitido solamente dos imparables y una carrera con 16 bateadores recetados.
Su formidable actuación en Philadelphia, terminó siendo más especial de lo que se esperaba después de que sus compañeros relevistas se combinaran para completar el histórico no hit no run, siendo este el segundo en toda la historia en una Serie Mundial y el primero de manera combinada
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