Solicitantes de asilo que robaron tienda Macy’s de Nueva York serían deportados si son condenados
Cuatro inmigrantes hispanos fueron arrestados por presuntamente trasladarse desde Manhattan en un auto de placas falsas para robar una tienda Macy's en Long Island (NY). Ahora enfrentan riesgo de deportación si son condenados
Cuatro inmigrantes detenidos. Crédito: Nassau County Police Department | Cortesía
Cuatro inmigrantes hispanos que fueron arrestados por presuntamente trasladarse desde Manhattan en un auto de placas falsas para robar una tienda Macy’s en Long Island (NY) no enfrentarán la deportación, a menos que sean condenados, opinó un experto legal.
Los acusados Wrallan Cabezas Meza (19), Miguel Ángel Rojas (21), Rafael Rojas (27) y José García Escobar (30) forman parte de la oleada de miles de inmigrantes que están esperando asilo después de ser transportados en autobús a Nueva York desde Texas el año pasado. El riesgo de su deportación podría replicarse para otros migrantes indocumentados que sean detenidos cometiendo delitos.
A estos cuatro acusados de robar más de $12,000 dólares en mercancía en la tienda Macy’s de “Roosevelt Field”, “Se les da el beneficio de la duda porque tienen una solicitud pendiente con los [Servicios de Ciudadanía e Inmigración de EE. UU.]”, dijo al New York Post Luis Nicho, abogado de inmigración con sede en Queens.
“[El Departamento de Seguridad Nacional] normalmente los descalificaría para el asilo y los pondría en proceso de deportación”, agregó Nicho. Por ahora es probable que las fuerzas del orden estén esperando a ver cómo se resuelve el caso del robo.
Los cuatro están acusados de conducir desde Manhattan hasta el centro comercial, el más grande de Nueva York, ubicado en el condado de Nassau el 9 de enero y llevarse la mercancía sin pagar. Fueron atrapados cuando los policías detuvieron su lujoso BMW 2006, que tenía placas falsas, según las denuncias penales presentadas en el caso.
Nicho dijo que el estatus de “santuario” de inmigración del estado NY también juega un papel. “La actitud de la ciudad de Nueva York viene con que están sobrecargados y no quieren cooperar con los federales”, dijo. “Pero lo harán cuando se trate de un delito lo suficientemente grave”.
“El estatus de ciudad santuario ayuda, con tantos defensores en la ciudad para ellos”, dijo Nicho. “Sin una condena penal real, le está pidiendo a la policía local que haga cumplir las leyes civiles de inmigración”.
En los últimos meses la ciudad de Nueva York ha visto llegar una avalancha de migrantes enviados en buses desde el estado fronterizo Texas. Quienes llegan no tienen permiso de trabajo, algo que el alcalde Eric Adams ha unido a sus requerimientos federales para evitar riesgos de indigencia, depresión y criminalidad.
En diciembre la alcaldía de NYC anunció $2.1 millones de dólares para expandir planes de ayuda a inmigrantes llegados en 2022, en medio de una batalla política nacional entre demócratas y republicanos.
A principios de 2023 Adams viajó a Washington DC y la frontera en Texas, endureciendo su postura sobre inmigración, que había sido laxa el año pasado. “No hay más espacio… pero las leyes locales nos obligan aquí a proporcionar refugio y seguir avanzando en la dirección correcta”, afirmó. “Esto ha impactado la calidad de vida en Nueva York“.
Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.
