Elon Musk está vendiendo hasta las macetas de Twitter para generar dinero

Elon Musk está decidido a hacer rentable a Twitter a como dé lugar, ya sea con publicidad, con servicios diferenciados para los usuarios o incluso vendiendo macetas de las oficinas a los empleados

Maceta

Elon Musk es un emprendedor nato capaz de vender una simple maceta o un sofisticado vehículo eléctrico. Crédito: Shutterstock

Seguramente Elon Musk nunca imaginó que la compra de Twitter lo llevaría a situaciones extremas para lograr hacerla rentable, pues según un ingeniero de la compañía que habló con la BBC, el millonario intentó que el personal de la plataforma comprara las macetas de sus oficinas.

Desde que Musk compró a Twitter por $44,000 millones de dólares, el empresario está buscando un retorno de inversión acelerado, por lo que ha recurrido a trabajar con el mínimo personal indispensable, a eliminar servicios para el personal, a ofrecer servicios diferenciados para los usuarios y hasta ha dejado de pagar renta en las oficinas.

Pero de acuerdo con la fuente anónima de la BBC, el último intento de Musk fue que los empleados compraran las macetas que estaban en la oficina para recuperar algunos dólares.

El informante dijo que el enfoque de empresa está ahora en recabar dinero, por lo que el millonario ha recurrido incluso a la subasta de cientos de artículos del mobiliario de oficina, equipos de cocina industrial, adornos, máquinas de café y sillas.

Musk ha dicho que está decidido a hacer rentable a la red social y está decidido a hacer lo necesario para que así sea. En noviembre comentó que Twitter estaba perdiendo más de $4 millones de dólares al día y no permitirá que su nueva adquisición caiga en la banca rota.

Nadie duda que Musk es un exitoso hombre de negocios y que está aplicando medidas en Twitter para que genere dinero, a través de publicidad, servicios como el de Twitter Blue y otros, pero es bien sabido que recurre a medidas extremas para lograr sus objetivos y ahorrar.

Uno de los casos memorables de Musk, fue cuando estando con su novia Grimes, descubrieron que el colchón en el que estaban acostados estaba roto y ella pensaba que el millonario lo cambiaría por uno nuevo. Pero Musk fue más práctico y ahorrativo y dijo que no era necesario, que lo cambiaría por otro usado que tenía en una de sus propiedades.

Grimes asegura que Elon Musk “vive a veces por debajo del umbral de la pobreza”, a pesar de que es el hombre más rico del mundo.

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