Inmigrantes de Nueva York que reparten comida no se pueden dar el lujo de dejar de trabajar pese a la mala calidad del aire

Desde hace un par de días Nueva York enfrenta serias afectaciones ante la densa capa de humo provocada por los más de 400 incendios forestales en Canadá y que hasta el momento ha hecho que la ciudad “se pinte de naranja” y que sus ciudadanos permanezcan en casa por recomendación de las autoridades, pero quienes no han podido dejar de salir a trabajar son los inmigrantes.

Si bien las actividades en la ciudad siguen su curso de forma “normal”, los trabajadores inmigrantes delivery han seguido haciendo sus entregas en bicicleta, motocicletas, scooters, así como otros vehículos donde están directamente expuestos a la mala calidad del aire.

“Si sales al exterior por largos periodos de tiempo, sientes que cuesta respirar. Empieza a dolerte. Es como el humo del cigarrillo. Cuando estás afuera, más te duele la garganta“, dijo un inmigrante chino a Telemundo.

El inmigrante de 38 años reveló al medio antes citado que así como él, cientos de compañeros que se dedican a repartir comida en la ciudad no se pudieron darse el lujo de perder un día de trabajo, porque en la actualidad no existe un salario mínimo para quienes operan como contratistas independientes, y han pasado su jornada laboral de 10 horas de “manera normal”.

“Como contratistas independientes, muchos de ellos son responsables no solo de hacer este trabajo bajo su propio riesgo, sino también de encontrar sus propios instrumentos de trabajo, incluyendo para cuidar su salud y seguridad. Si se enferman, no podrían tener acceso a un seguro de salud ni responsabilizar a su empresa. Si se niegan a trabajar las horas que están programadas, lo más probable es que les desactiven sus cuentas, lo cual es una represalia”, dijo Ligia Guallpa, directora de Workers Justice Project, a la cadena de televisión.

El hispano Antonio Solis indicó también a Telemundo que tomar un día libre significa para ellos no poder pagar el alquiler o las facturas a tiempo, además, pone en peligro el envío de dinero que hacen a sus familiares.

Pero, Solis le ha visto el “lado bueno” a esta emergencia: sus clientes se muestran más generosos con él y las propinas suelen ser las mejores.

“Lo que he aprendido en todo este tiempo es que hay que lidiar con el mal tiempo para que haya más pedidos o más propinas. Solo recibimos buenas propinas cuando llueve, cae nieve o hay mal tiempo“, dijo Soles quien forma parte de Los Deliveristas Unidos.

“Los deliveristas están en la primera línea. Ellos están haciendo frente a una emergencia al ser las personas que entregan no solo alimentos, sino también máscaras, medicamentos, elementos esenciales para mantener a los neoyorquinos seguros en sus hogares, mientras arriesgan sus vidas”, mencionó Guallpa.

En tanto, los dueños de aplicaciones de entrega de comida como GrupHub indicaron que los empleados que deseen quedarse en casa están en todo su derecho y no serán sancionados, pero quienes deseen seguir adelante contarán con kits gratuitos de protección, mismos que podrán solicitar a través del sitio oficial de la empresa.

Air Quality Index (AQI) informó que los índices de la calidad del aire en la capital estadounidense superaban los 310 y alcanzaba nivel 6 o peligroso, por lo que el Servicio Meteorológico Nacional pidió a los ciudadanos permanecer en sus casas.

Así como ciudad de Nueva York, Filadelfia, Harrisburg, en Pensilvania, Baltimoe, Newark, Pittsburgh, Detroit, Cleveland, Cincinnati e Indianápolis se han visto severamente afectados por los incendios de Canadá.

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