Latino empleado municipal murió en choque con borracho en auto de lujo en Queens, Nueva York

Un joven de 24 años fue acusado de chocar al conducir borracho y causar la muerte de Michael Rodríguez (38), empleado municipal de NYC que viajaba como pasajero en un camión en Queens

Unidad paramédica de rescate (EMS) en NYC.

Unidad paramédica de rescate (EMS) en NYC/Archivo. Crédito: Andrés Correa Guatarasma | Cortesía

Errick Persaud, joven de 24 años, fue acusado de chocar al conducir borracho y causar la muerte de Michael Rodríguez (38), empleado municipal de NYC que viajaba como pasajero en un camión la madrugada del jueves en Queens.

El acusado iba al volante de un lujoso Mercedes-Benz que se estrelló contra un camión del Departamento de Medio Ambiente (DEP) de la ciudad de Nueva York en Atlantic Ave. y Lefferts Blvd. en el vecindario Richmond Hill a las 2:30 a. m. del jueves.

Persaud, quien afirmó que solo había tomado dos cervezas, fue acusado el jueves de homicidio vehicular y conducir en estado de ebriedad. Su fianza se fijó en $125,000 dólares en su lectura de cargos, indicó Daily News.

La policía dijo que Rodríguez viajaba en el asiento delantero del pasajero de un camión del DEP que fue golpeado por el Mercedes de Persaud

El camión se dirigía hacia el este por la avenida cuando Persaud, quien conducía hacia el sur por Lefferts Blvd, se saltó un semáforo en rojo y se estrelló contra el camión. El impacto del choque volcó el vehículo municipal.

El conductor de 40 años sufrió heridas leves y se negó a recibir atención médica, dijo la policía, pero Rodríguez fue expulsado del camión y quedó atrapado debajo de él.

Los médicos lo llevaron de urgencia con heridas graves en la cabeza y el cuerpo al Hospital Jamaica, donde murió.

Persaud, con los ojos rojos, el habla arrastrada y el aliento apestando, salió a tropiezos de su automóvil, según los documentos judiciales, y dio .134 en una prueba de alcohol.

Más tarde le dijo a la policía que había trabajado hasta las 8 p.m. la noche anterior y luego salió con amigos, alegando que sólo había consumido dos cervezas Coronas y se dirigía a comprar algo de comer cuando ocurrió el accidente, según documentos judiciales.

Las autoridades de Nueva York recuerdan que hay cero tolerancia con conductores que manejen con exceso de velocidad y/o se pongan al volante bajo efectos de alcohol y drogas.

Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.  

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