Papá mató a golpes a su bebé recién nacida porque estaba “frustrado” porque ella no comía y lloraba
El hombre, de 24 años de edad, le causó a su hija fracturas en la costilla, el brazo, el hombro y ambos fémures de la niña, así como una lesión en la médula espinal y sangrado e inflamación en el cerebro
Dyllan Dwight Towles ha sido sentenciado a 50 años de prisión. Crédito: Fiscalía del condado de Kootenai | Cortesía
En un escalofriante caso que ha conmocionado a la comunidad de Idaho, un joven padre de 24 años, Dyllan Dwight Towles, ha sido sentenciado a 50 años de prisión tras admitir haber asesinado a su hija recién nacida en 2021, golpeándola y sacudiéndola “violentamente”. El hombre justificó el asesinato diciendo que estaba “frustrado” porque ella no comía y no paraba de llorar.
La jueza de distrito del condado de Kootenai, Barbara Duggan, dictó la condena el martes, marcando el fin de un proceso judicial que ha dejado a muchos conmocionados, según informó Law&Crime.
Este trágico incidente salió a la luz cuando, el 18 de septiembre de 2021, Towles llamó al 911 para informar que su hijo de 2 meses no respiraba. Al llegar al lugar, los socorristas se encontraron con una escena devastadora: la niña yacía inconsciente en el suelo, con signos evidentes de maltrato.
Los informes médicos revelaron lesiones impactantes en la pequeña, que incluían “un gran hematoma circular en la mejilla, un hematoma en la pierna derecha y marcas de mordeduras en el antebrazo izquierdo, el tobillo izquierdo y debajo de la rodilla“.
Múltiples fracturas
A pesar de los esfuerzos de los socorristas, la niña fue trasladada de urgencia al hospital, donde fue declarada muerta.
La autopsia, realizada por la Oficina del Médico Forense del Condado de Spokane, arrojó resultados desgarradores. Se encontraron fracturas en la costilla, el brazo, el hombro y ambos fémures de la niña, así como una lesión en la médula espinal y sangrado e inflamación en el cerebro. Las autoridades señalaron que estas heridas estaban en diferentes estados de curación, indicando un patrón de abuso prolongado.
En respuesta a las preguntas sobre los eventos que llevaron a su llamada al 911, Towles inicialmente afirmó que todo era normal.
Sin embargo, más tarde admitió que había golpeado y sacudido a su hija “bastante violentamente” después de que dejara de responder a estímulos cotidianos. Un comunicado de la Fiscalía del condado de Kootenai detalla que Towles “jugó con sus piernas” en un intento desesperado de obtener una respuesta.
El jurado, tras revisar los hechos, emitió un proyecto de ley verdadero acusando a Towles de asesinato en primer grado el 6 de julio de 2023. Agentes del Departamento de Policía de Post Falls lo arrestaron esa misma noche, y durante el interrogatorio, Towles finalmente admitió haber sacudido a su bebé por frustración.
“Al principio, Towles repitió su historia original al detective Uhrig. Sin embargo, Towles finalmente se derrumbó y admitió haber sacudido a su bebé por frustración porque ella no comía y no dejaba de llorar”, explican en el documento.
Antecedentes penales
Este impactante caso adquiere una dimensión aún más sombría al descubrirse que Towles tenía antecedentes penales previos.
En 2019, fue declarado culpable de un delito grave de lesión a un niño después de enfrentar originalmente acusaciones de estupro con una menor de 15 años. Sorprendentemente, Towles estaba en libertad condicional por este cargo en el momento del trágico asesinato de su hija.
Towles, quien el año pasado se declaró culpable de un cargo menor de asesinato en segundo grado, podrá optar a la libertad condicional después de cumplir al menos 25 años de su condena.
Con información de Law&Crime.
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