Alcalde Adams asegura que seguirán ‘limpiando la Roosevelt’ y recalca que no apoya legalización del trabajo sexual

Una de las grandes quejas que el alcalde, Eric Adams, ha recibido por parte de neoyorquinos y políticos progresistas desde que asumió las riendas de la Gran Manzana, es que ha intensificado la persecución a delitos contra la calidad de vida, como orinarse en las calles, andar con bebidas alcohólicas en público, entrar al metro sin pagar, botar basura en las vías y vender comida sin control de sanidad, entre otros.

Y justo cuando diferentes organizaciones y oficiales electos siguen señalando a su administración y a la policía del NYPD de penalizar desproporcionadamente a comunidades vulnerables y minorías por faltas leves, como dejó ver un reciente reporte que mostró que el 53% de los neoyorquinos multados por infracciones menores son hispanos, el mandatario habló sobre lo que se vive en la populosa Avenida Roosevelt, en Queens, y dijo que seguirá persiguiendo a infractores.

Así lo recalcó este martes el Alcalde, durante una conferencia de prensa en la sede de la Administración Municipal, en la que escuchó preocupaciones manifestadas por residentes de vecindarios como Jackson Heights, Elmhurst y Corona, sobre el incremento de delitos de calidad vida en sus vecindarios y la prostitución.

Contrario al llamado que algunos grupos hacen para que se disminuya la presencia policial y dejando ver que no apoya la campaña que se ha ido librando en Albany para que se legalice el ejercicio del trabajo sexual, Adams advirtió que los operativos del NYPD en la Roosevelt, continuarán. Frenar el tráfico sexual es una de sus prioridades.

“Tenemos un plan completo para la Avenida Roosevelt, limpiarla, seguir luchando contra el tráfico sexual ilegal que ocurre allá. Algunas personas piden que se legalice, pero digo que no se debe legalizar por el tráfico sexual y algunos otros problemas, pero hay otros oficiales electos que dicen que deberían legalizarlo, y que no hay nada malo con esos burdeles. Yo voy contra eso”, dijo Adams.

El jefe de la Gran Manzana insistió en que la orden dada a los uniformados del NYPD, que según recalcó, está a tono con el deseo de los residentes de las comunidades que rodean la Avenida Roosevelt, es que no cesen las labores para frenar los delitos de calidad de vida y venta sexual. Sin embargo arremetió contra aquellos líderes que insisten en ir por otra dirección.

“Yo hago un llamado a que se persigan a aquellos que cometen actos ilegales de calidad de vida, pero ustedes necesitan saber que hay gente quiere que esas cosas sigan pasando. Hay gente defendiendo que siga pasando. Dicen que la policía no debe estar ahí, ni hacer presencia para perseguir esos comportamiento ilegales“, comentó ADams, reiterando que su Administración no va a escuchar a quienes tienen esas posturas.

Tras ser interrogado sobre las labores concretas que el NYPD está adelantando en inmediaciones de la Avenida Roosevelt contra el presunto aumento de miembros de pandillas,que se están tomando parques y haciendo de las suyas en zonas públicas, el alcalde Adams aseguró que no tenía información de que eso estuviera ocurriendo, pero mencionó que investigarán las quejas.

Avenida Roosevelt, en Queens. Foto Edwin Martínez

“Voy a hablar con el comandante del NYPD allá, es un gran comandante que estabilizó la Plaza (Corona Plaza) que estaba allá fuera de control. Había a la 1:30 de la mañana, comida por todas partes, palomas sobre la comida… no queremos que las pandillas agarren nuestros parques que son de nuestros niños”, dijo el líder demócrata.

Adams insistió en que como Alcalde su obligación es escuchar a los neoyorquinos en las comunidades y trabajar para ayudar a resolver las problemáticas de seguridad pública que vecinos de los barrios manifiesten, y advirtió que atacar los delitos de calidad de vida, es muy importante.

“Me encanta cuando hacen esas reuniones comunitarias en las que esas cosas se ponen de manifiesto, porque muchos creen que soy el único que cree que los asuntos de calidad de vida como esos, son importantes“, dijo el burgomaestre. “Cuando voy a las reuniones en las comunidades, y escucho a la gente mencionando lo que quieren que se haga, eso me ayuda a decir que estoy hablando a nombre de los neoyorquinos”.