El Salvador contabiliza 700 días no consecutivos sin homicidios desde 2019
Organizaciones han expresado dudas sobre la veracidad de los datos presentados por el gobierno del presidente Nayib Bukele
Organizaciones denuncian la falta de transparencia en las cifras del gobierno salvadoreño Crédito: Moises Castillo | AP
El ministro de Seguridad de El Salvador, Gustavo Villatoro, informó este viernes que el país ha acumulado un total de 700 días no consecutivos sin homicidios desde 2019, un hito que fue destacado por las autoridades gubernamentales.
“Contabilizamos 700 días sin homicidios, un logro que refleja el esfuerzo coordinado desde un Estado de Derecho”, señaló Villatoro en un mensaje publicado en la red social X.
El funcionario también destacó el sacrificio de las fuerzas de seguridad y afirmó que “estos logros en materia de seguridad son también el resultado del sacrificio de nuestros héroes que dieron su vida en el cumplimiento del deber”.
A pesar de los anuncios, organizaciones como el Observatorio Universitario de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana han expresado dudas sobre la veracidad de los datos presentados por el gobierno del presidente Nayib Bukele.
En diversas ocasiones, estos organismos han señalado que las cifras de homicidios podrían no reflejar la realidad completa.
El OUDH argumenta que el gobierno no incluye ciertos tipos de muertes violentas, como la aparición de osamentas humanas o los fallecimientos de pandilleros en enfrentamientos con la policía.
Además, las muertes de presuntos delincuentes a manos de civiles, que en administraciones anteriores eran consideradas homicidios, también han sido excluidas del recuento oficial, señala Efe.
Estas omisiones han generado críticas y preocupación por la falta de transparencia en la divulgación de las estadísticas sobre la violencia en el país.
Casi 82,000 personas detenidas desde 2022
El gobierno de Bukele atribuye la notable reducción de los homicidios a la implementación del régimen de excepción, vigente desde marzo de 2022.
Bajo este régimen, se han detenido a más de 81,900 personas, y se han reportado más de 300 fallecimientos dentro de las cárceles. A pesar de las controversias, el ejecutivo sostiene que estas medidas han sido cruciales para mejorar la seguridad en el país.
Bukele asumió la presidencia en junio de 2019, momento en el que El Salvador ya había registrado tres años consecutivos de disminución en la tasa de homicidios.
En 2015, el país alcanzó su punto más crítico, con una tasa de 103 homicidios por cada 100,000 habitantes. En 2018, esta cifra había descendido a 50,3 y continuó bajando con la llegada de Bukele al poder, alcanzando una tasa de 36 homicidios por cada 100,000 habitantes en 2019.
La tendencia a la baja se mantuvo en los años posteriores. En 2020, la tasa de homicidios se ubicó en 21,2; en 2021, descendió a 18,1 y en 2022 registró una caída drástica hasta 7,8. Para 2023, la cifra llegó a 2,4, lo que representa una reducción significativa en comparación con años anteriores.
Sin embargo, los datos oficiales sobre la violencia en El Salvador son divulgados de manera limitada y bajo secreto. Las cifras son publicadas esporádicamente por el gobierno o el propio presidente a través de redes sociales, lo que dificulta la verificación independiente de estos números.
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