$2.7 millones para niñera latina espiada en su cuarto mientras trabajaba en hogar de Nueva York
Una niñera recibirá $2.78 millones de dólares como compensación por haber sido grabada en video sin su permiso en el hogar donde trabajaba en NYC
Kelly Andrade, niñera colombiana de 27 años, recibirá $2.78 millones de dólares como compensación luego de que fuese grabada en video sin su permiso mientras vivía y trabajaba en un hogar en Staten Island (NYC), tras una demanda civil que presentó.
La decisión del jurado llegó tres años después de que la residente de Nueva Jersey presentara una demanda en el Tribunal Federal de Brooklyn contra Michael Esposito, de 35 años, quien había sido detenido en marzo de 2021 en relación con el incidente, recordó StatenIslandLive.com.
El jurado impuso $780,000 dólares por daños y perjuicios por angustia emocional contra los esposos Michael y Danielle Esposito, así como $2 millones en daños punitivos contra el hombre, un empresario de restaurantes.
Andrade había sido contratada para cuidar a los cuatro hijos de la familia y se le proporcionó un dormitorio privado en la residencia en Tottenville. Según la demanda, a menos de tres semanas de haber comenzado el trabajo la joven notó un detector de humo en su habitación que reposicionaba constantemente sobre su cama.
Después de sospechar, Andrade examinó el dispositivo y encontró una cámara oculta en el interior con una tarjeta de memoria que contenía “cientos” de videos, que en su mayoría la mostraban desnuda o con poca ropa, según la demanda.
La niñera estaba tan aterrorizada de que su empleador pudiera estar armado con una pistola que saltó por una ventana para escapar, según los documentos judiciales. Después de huir de la casa de los Esposito y presentar una denuncia en su contra en la Comisaría 123 de NYPD, Andrade se quedó temporalmente sin hogar y viviendo en la calle, dijo su abogado, Zachary Holzberg.
La empresa “Cultural Care Au Pair”, con sede en Massachusetts, en la que Andrade trabajaba en el momento del incidente, también fue nombrada como acusada en la demanda, pero la joven recientemente llegó a un acuerdo con ellos por una cifra no revelada, según documentos judiciales.
Mientras tanto, Esposito pudo evitar la cárcel tras declararse culpable de un delito grave de vigilancia ilegal. Después de completar un año de asesoramiento, se le permitió retirar esa admisión y declararse culpable de un delito menor: intento de vigilancia ilegal. Se le concedió una libertad condicional de dos años, según un portavoz de la oficina del fiscal de distrito del condado Richmond.
Al presentar la demanda por discriminación y un ambiente de trabajo hostil, la colombiana dijo que se había sometido a cientos de horas de capacitación antes de ser contratada por la agencia “Cultural Care Au Pair” para venir a Estados Unidos, donde la compañía la colocó en la casa valorada en $800,000 dólares de Esposito, dueño de tres franquicias del restaurante “LaRosa Chicken & Grill”.