Crece malestar por decisión de comisionada del NYPD de no despedir a oficial del NYPD que mató a conductor
Líderes políticos, defensores de derechos humanos y familiares de Allan Feliz exigen a la jefe del NYPD que actúe con justicia
La nueva comisionada del NYPD, Jessica Tisch, durante una conferencia de prensa en marzo pasado, cuando era la comisionada del Departamento de Saneamiento de la ciudad. Crédito: Caroline Willis | NYC Mayoral Office
Una ola de críticas sigue creciendo contra la comisionada del NYPD, Jessica Tisch, luego de que la semana pasada rechazara la recomendación de un juez administrativo de procesar y desvincular de la policía al teniente Jonathan Rivera, quien en 2019 mató al conductor Allan Felix en medio de una parada de tránsito en El Bronx por no llevar puesto el cinturón de seguridad.
La decisión de la jefe de la policía de no despedir al uniformado sigue levantando ampolla entre familiares de la víctima y líderes políticos, quienes este martes en la tarde están convocando a una manifestación a las afueras del comando central del NYPD en 1 Police Plaza para exigir que se haga justicia.
“Estamos furiosos y devastados por la indignante, cobarde y vergonzosa decisión de la Comisionada Tisch de revocar el veredicto de culpabilidad del Comisionado Adjunto Maldonado y su negativa a despedir o, de alguna manera, sancionar al Teniente Jonathan Rivera por el asesinato de Allan”, aseguró la familia Feliz en un comunicado. “Con este cambio de postura, Tisch ha dejado algo inequívocamente claro: su lealtad no es con los neoyorquinos, sino con los policías violentos e irresponsables que aterrorizan a nuestras comunidades”.
Mery Verdeja, madre del joven de 31 años, quien según las autoridades estaba en libertad condicional por cargos relacionados con drogas, y de quien los oficiales que lo detuvieron en la parada de tránsito aseguran que presentó la licencia de conducción de su hermano, pidió a la policía que no encubran al “asesino” de su hijo.
“Durante casi seis años, nuestra familia ha llorado la muerte de Allan al mismo tiempo que hemos luchado para que Rivera sea despedido el NYPD y a pesar del sufrimiento inimaginable, hemos luchado y superado innumerables obstáculos, demoras y obstrucciones por parte de la administración, el NYPD y el Sindicato de Tenientes, pero ver cómo revocan un fallo manipulando las cosas para proteger a los policías, es más doloroso”, agregaron los parientes de Feliz.
La presidenta del Concejo Municipal, Adrienne Adams rechazó la postura de la jefe de la policía y mientras mostró su apoyo a la familia de Feliz, hizo un llamado urgente a la Comisionada Tisch a que no se ponga del lado de lo que calificó como “prácticas corruptas del statu quo del pasado” y exigió que acate la recomendación de la jueza del NYPD y de la Junta de Revisión de Conciliación y Restricción (CCRB).
“Estamos profundamente decepcionados con la decisión preliminar de la Comisionada Tisch del NYPD de ignorar a la jueza y al Comisionado Adjunto del NYPD, quienes recomendaron el despido del Teniente Rivera por el asesinato de Allan Feliz”, dijo la líder legislativa. “Esta atroz decisión traiciona la confianza pública y la rendición de cuentas necesarias para promover la seguridad pública. Acompañamos en el dolor a la familia de Allan Feliz en este momento tan doloroso, en el que el Alcalde y la Comisionada de Policía los han traumatizado de nuevo con este anuncio.
Yul-san Liem, subdirectora del Comité de Justicia, arremetió contra la Comisionada del NYPD, de quien dijo que con la decisión de no hacer justicia y “tapar” a sus subalternos, “ha mostrado su verdadera cara”, poniéndose “del lado del asesino” en un caso de mala conducta.
“La decisión de la Comisionada Tisch de no despedir al Teniente Jonathan Rivera constituye una grave injusticia para la familia Feliz, una traición imperdonable a los neoyorquinos y una prueba de que el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) nunca rendirá cuentas“, dijo la defensora. “El Teniente Rivera asesinó brutalmente a un neoyorquino sin causa justificada y tenía una larga lista de quejas en su contra, tanto antes como después de matar a Allan. Debería haber sido despedido hace años, y la negativa de la Comisionada Tisch y del Alcalde Adams a hacerlo pone en riesgo a todos los neoyorquinos”.
La activista agregó a pesar de “lo largo y traumático” que ha sido el proceso, “no tiene nada que ver con la justicia ni con la seguridad” sino con “un sistema diseñado para proteger a los policías abusivos a toda costa, desgastar a las familias y retrasar y disolver cualquier cambio en la disciplina de los agentes”.
El Comité de Justicia agregó que tanto la Junta de Revisión de Conducta de la Ciudad de Nueva York (CCRB) como el propio Comisionado Adjunto de Juicios del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) declararon a Rivera, de quien mencionaron cuenta con 39 acusaciones e mala conducta, culpable del asesinato de Allan, y en vez de tomar acciones para separarlo de su cargo, continúa.
El NYPD defiende su decisión advirtiendo que la comisionada de policía, quien tiene la última palabra en materia disciplinaria, desestimó la recomendación de despido, tras haber revisado el caso y concluir que el teniente que disparó fatalmente contra Feliz, lo hizo porque creyó que iba a atropellar a Edward Barrett, otro agente de policía que estuvo presente durante la parada de tráfico.
