Vivir “el luto” ayudará a superar el fracaso
La idea no es estancarte en la falla, sino analizarla para aprender de ella, así el proceso duela
No siempre es posible ganar, debemos entender que el triunfo es algo que podremos ver llegar en nuestra vida, pero que puede que no permanezca para siempre.
“Hay que saber perder”, eso nos decían nuestros padres cuando pequeños, aún así es un asunto difícil de aprender.
Cuando enfrentamos pérdidas, fallas o fracasos, tendemos a escuchar que debemos ocupar nuestra mente en algo más. Ignorar el dolor no es la mejor opción. Puede funcionar temporalmente, pero si tu intensión es no tener que repetir la misma lección en tu vida, más te vale que aprendas de lo vivido.
Investigadores han demostrado que después de pensar en el sentimiento del fracaso y analizar la situación, viene un descanso porque se piensa en la oportunidad de hacerlo mejor. Aprender de los errores es lo más productivo del fracaso. Sacar provecho de no lograr alcanzar la meta es la clave para garantizar el éxito.
Cuando falles en el intento recuerda que todo invento ha pasado por intentos fallidos. Nadie lo ha logrado en la primera vez. Algunas enseñanzas llegan por las experiencias de otros, y otras por las propias. Thomas Alva Edison, el inventor del bombillo, analizó más de 300 teorías y tuvo 1000 intentos fallidos antes de lograrlo. Todo es cuestión de perspectiva, pues como Edison: “No fueron mil intentos fallidos, fue un invento de mil pasos”.
No importa cuántas veces caigas, siempre levántate y está listo para volver a comenzar y arriesgarte a salir triunfante.