Proponen que Nueva York se convierta en ‘estado santuario’ por ley
La "Ley de dignidad para los inmigrantes", introducida por el Senador José Serrano Jr. prohíbe la colaboración con agencias federales, como ‘La Migra'
En el 2017, y como una manera de proteger a los inmigrantes indocumentados que viven en la Gran Manzana, y que no hayan cometido delitos graves, Nueva York se convirtió en ‘ciudad santuario’ por ley, prohibiendo así la colaboración entre agencias municipales con agencias federales, como ‘La Migra’.
Y justo cuando la Legislatura estatal sigue avanzando con la promulgación de leyes progresistas, un proyecto de ley que busca convertir a todo estado en un ‘estado santuario’, espera lograr luz verde y convertirse en ley para blindar a todos los municipios de Nueva York de las amenazas del Gobierno federal contra la comunidad inmigrante.
El proyecto S5242, que ya fue introducido en la Legislatura por el senador estatal José Serrano Jr., pretender crear la llamada “Ley de Dignidad para los inmigrantes”, que prohíbe la detención de personas por la violación de las leyes federales de inmigración, evitando que eventualmente puedan ser puestos en procesos de deportación.
El senador de El Bronx calificó la iniciativa como una propuesta justa, y aunque en sesiones anteriores proyectos similares fueron rechazados por la entonces mayoría republicana, esta vez hay esperanzas de que la ley vea la luz, en manos de una Legislatura controlada por los demócratas.
“Programas como ‘Comunidades Seguras’ han creado un efecto escalofriante en las poblaciones inmigrantes y a menudo, los inmigrantes temen y dudan en presentarse cuando han sido víctimas o testigos de crímenes”, comentó el senador Serrano, al mencionar los efectos negativos que ha generado la política de intimidación de Washington, al tiempo que advirtió que volver santuario al estado no significa que habrá impunidad ni protección a indocumentados que cometan delitos serios.
“Este proyecto de ley, que no protege a quienes han cometido delitos violentos y ciertos delitos menores, es una respuesta de sentido común para mejorar la seguridad pública y debería ser un tema no partidista, en el que espero generar consenso”, agregó el legislador.
Un freno para ICE
“La sección uno del proyecto de ley dice que las agencias de aplicación de la ley en el estado no detendrán a individuos basados en una solicitud de detención de ICE después de que sea elegible para ser liberado, a menos que, la persona haya sido condenado por un delito grave violento en los últimos cinco años o esa persona haya sido condenado por ciertos delitos menores”, asegura el proyecto de ley, que tuvo versiones similares en 2013, 2015 y 2017 sin éxito.
Actualmente el proyecto se encuentra en manos del Comité de Finanzas del Senado, que lo someterá a consideración, pero se anticipa que allí tendrá buen puerto, pues la presidenta de esa junta, la senadora Liz Krueger, es copatrocinadora de la medida.
De convertirse en ley estatal, Nueva York se sumaría a los estados de California y Connecticut que ya son santuario por ley.
Caitlin Girouard, vocera del gobernador Andrew Cuomo, destacó que la Administración estatal ha estado comprometida en la defensa y protección de la comunidad inmigrante con acciones concretas y aseguró que analizarán la propuesta del senador Serrano.
“El año pasado, el Gobernador Cuomo firmó una orden ejecutiva para prohibir los arrestos de ICE en todas las agencias ejecutivas sin una orden judicial, y ahora ha propuesto que se codifique su orden ejecutiva en legislación para aplicarla en todos los edificios públicos”, dijo la funcionaria. “Continuaremos revisando cualquier otra legislación que podría proteger a los inmigrantes en Nueva York de las acciones imprudentes tomadas por ICE”.
Defensores de la medida señalan que actualmente menos del 10 por ciento de los inmigrantes detenidos bajo el programa federal “Comunidades Seguras”, que tiene como objetivo arrestar a personas que representen una amenaza pública, realmente lo son, poniendo a miles de indocumentados sin historial criminal en procesos de deportación.
A pesar de contar con apoyo en diferentes sectores de ambas cámaras en Albany, otras voces más conservadoras ya han puesto el grito en el cielo, calificando la medida como insensata para la seguridad del estado, al tiempo que premia a quienes no siguen las leyes de inmigración.
“(Es una medida) equivocada, peligrosa y sin sentido y me sorprende que los legisladores estén haciendo todo lo posible para que los ciudadanos estén menos seguro”, aseguró la asambleísta estatal Nicole Malliotakis.