Generales desmienten a Biden y afirman que sugirieron mantener 2,500 militares en Afganistán
El presidente está bajo críticas, luego de que altos mandos militares revelaran haber recomendado mantener a miembros del Ejército en Afganistán, a pesar de que Biden había afirmado que no recibió esa sugerencia
Altos manos militares dijeron en el Congreso que habían recomendado que 2,500 soldados estadounidenses permanecieran en Afganistán, en una postura totalmente contraria a la que afirmó el presidente Joe Biden.
El general Frank McKenzie, jefe del Comando Central, y el general Mark Milley, presidente del Estado Mayor Conjunto, reconocieron durante su testimonio público –por separado– que estaban de acuerdo con la recomendación del general del Ejército, Austin Miller, quien sugirió dejar a ese número de soldados.
Sin embargo, los funcionarios se negaron a detallar cómo asesoraron al mandatario demócrata, pero dejaron abierta las dudas sobre las acciones en Afganistán, las cuales han afectado la popularidad del presidente.
“No compartiré mi recomendación personal al presidente, pero le daré mi opinión honesta… Recomendé que mantuviéramos 2,500 soldados en Afganistán“, dijo McKenzie. “También recomendé a principios del otoño de 2020 que mantuviéramos 4,500 soldados en ese momento. Esas son mis opiniones personales”.
Los generales rindieron testimonio ante el Comité de Servicios Armados del Senado este martes y respondieron a duros cuestionamientos, principalmente del republicano James Inhofe (Oklahoma).
En su oportunidad, Milley dijo que estaba de acuerdo con la recomendación de McKenzie, aunque destacó que su opinión se remontaba al otoño pasado, cuando todavía estaba el presidente Donald Trump, quien firmó el acuerdo con talibanes para el retiro de las tropas a más tardar en mayo del 2021.
En agosto pasado, el presidente Biden negó en ABC News que sus mandos militares le recomendaran dejar al menos 2,500 soldados.
“No, no lo hicieron”, dijo Biden entonces.
El general Milley que Estados Unidos habría vuelto a estar en guerra con los talibanes si el Ejército estadounidense se hubiera quedado después del 31 de agosto, la fecha límite dada a conocer por el propio presidente Biden.