Thanksgiving 2021: 3 formas de descongelar el pavo a tiempo y de forma segura
Sin lugar a dudas el pavo es el platillo protagónico de la cena de Acción de Gracias. En muchos casos solemos comprar el ave congelada y es muy importante descongelarla de manera adecuada, ya que si se realiza mal es un proceso que tiene un enorme potencial de causar posibles intoxicaciones alimentarias
El segmento de Today se inspiró en proponer algunos ahorros de temporada, teniendo en cuenta la inflación del 6.2% en alimentos de los últimos meses. Y que se ha considerado la más alta en las últimas 3 décadas. Crédito: Photo by Claudio Schwarz on Unsplash | Unsplash
La celebración favorita del año para muchos se acerca, el Thanksgiving que abre la puerta a la temporada navideña y viene acompañado de suculentos platillos. Para muchas personas la cena de Acción de Gracias este 2021, será sin lugar a dudas muy especial ya que la pandemia por covid-19 se encuentra en un mejor control. Sin embargo, seamos honestos organizar la cena no es tarea fácil. Más allá del alboroto que implica preparar una cena de proporciones épicas, en estos tiempos la seguridad alimentaria debe ser la máxima prioridad. Con base en ello nos dimos a la tarea de recopilar tres prácticos consejos imprescindibles sobre cómo descongelar un pavo congelado: si este proceso se realiza incorrectamente, tiene el potencial de traer una tonelada de bacterias que causan enfermedades a la mesa navideña.
Lo cierto es que existen formas bastante diferentes de descongelar un ave, sin embargo de manera general casi todas requieren comenzar el proceso unos días antes de la noche de la cena de Acción de Gracias. Por lo tanto la primer recomendación es prepararse con la debida anticipación, de lo contrario el pavo puede descongelarse días después del evento y sería una verdadera tragedia.
Tres formas sencillas de descongelar el pavo de Acción de Gracias:
1. Descongelado en la nevera
El primer error que probablemente todos hemos cometido alguna vez, es descongelar el pavo en la encimera de la cocina ¿La razón? Es el escenario perfecto para convertirse en un área de anidación de bacterias desagradables, o peor aún el bocadillo de medianoche de tu gato. Por fortuna la solución es increíblemente accesible: la nevera. Los expertos recomiendan colocar el pavo en una bandeja con bordes y de buena altura, ya que de manera natural al irse descongelando va liberar líquidos. Coloca el pavo con la pechuga hacia arriba (el área más gruesa entre las alas) y envuélvelo con plástico. Además existe una sencilla consideración, establecida por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos: cuando descongeles un pavo en el refrigerador, permite 24 horas de tiempo de descongelación por cada 4 a 5 libras de ave. Por lo tanto, si el pavo pesa de 4 a 12 libras, planifica descongelarlo en el refrigerador durante uno a tres días. Si pesa entre 12 y 16 libras, deberás asegurarte de colocarlo en el refrigerador de tres a cuatro días antes de que la esperada noche.
2. Envuelto y en agua fría
Este es uno de los métodos más famosos para descongelar, sin embargo en muchas ocasiones solemos pensar que tomará poco tiempo y la realidad es que todo proceso de descongelamiento tiene sus etapas. Si planeas descongelar el ave en agua fría, lo más importante y el primer paso es asegurarte de que el pavo esté en una bolsa de plástico a prueba de fugas antes de sumergirla. Este paso es clave ya que evitará cualquier contaminación cruzada y garantizará que el ave no absorba más agua durante el proceso de descongelación. Posteriormente, llena un recipiente con agua fría, deberá ser lo suficientemente grande para que quepa completo. Sumerge el pavo envuelto y cambia el agua cada media hora. Cambiar el agua ayudará a protegerlo de las bacterias contaminantes y claro el envoltorio mismo. Sobre los tiempos: permite 30 minutos de tiempo de descongelación por cada libra de pavo, lo que se traduce en dos a seis horas para un pavo de 4 a 12 libras. Un ave de 12 a 15 libras se descongelará en seis a ocho horas.
3. Descongela en el microondas
Este es uno de los escenarios menos explorados, pero es una buena alternativa en algunos casos: cuando las aves no son tan grandes. Por lo tanto el primer paso será asegurarte que el pavo que seleccionaste encaje en el microondas, además de considerar algo de espacio adicional para que pueda girar. Si el pavo es lo suficientemente pequeño, colócalo sin envolverlo en un plato apto para microondas. Presione el botón de descongelación, integra el peso del ave y deja que el microondas haga su magia. Si el microondas carece de función de descongelación, determine cuánto tiempo necesita el ave para permanecer allí en función de su peso. Para determinarlo considera lo siguiente: seis minutos por libra es una buena regla general. Dado que las microondas tienden a calentar las cosas de manera desigual, es muy importante que te asegures de girar y voltear la pieza de pavo durante el proceso de descongelación.
4. Algunos consejos adicionales
– Siempre confirma que el ave se descongeló por completo
Para asegurarte de que el ave está totalmente descongelada, introduce una mano en la parte hueca y comprueba si existe la presencia de cristales de hielo. Luego, con la ayuda de un tenedor, pincha las partes gruesas del ave y asegúrate de que ya no estén duras o heladas. Si es así, el pavo definitivamente necesita más tiempo para descongelarse.
– ¡No esperes! Cocina el pavo de inmediato
Una regla de oro, en la que coinciden los mejores chefs: una vez descongelado, el pavo debe cocinarse inmediatamente. Según datos liberados por el USDA, esto se debe a que una vez que el ave se descongela, las bacterias que estaban presentes antes de que se congelara por completo pueden comenzar a volver a crecer. Por lo tanto en cuanto corrobores que se descongeló por completo procede con su preparación y marinado, para hornear inmediatamente.
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