Beber té y café reduce significativamente el riesgo de derrame cerebral y ciertos tipos de demencia
Nuestras bebidas matutinas favoritas: el café y el té, podrían ser un gran aliado cotidiano para mantener a raya los accidentes cerebrovasculares y la demencia. Un nuevo estudio encabezado por la Universidad Médica de Tianjin en China, avala los beneficios de beber de 2 a 3 tazas diarias
De acuerdo con el estudio tanto el café como el té verde, contienen cafeína y sustancias antioxidantes que protegen la salud cardíaca y cerebral. Crédito: Shutterstock
Hoy en día cada vez son más las personas que se muestran interesadas en realizar ajustes dietéticos, con el principal objetivo de gozar de una mejor salud y sobre todo de prevenir afecciones crónicas. Recientemente, un estudio de gran tamaño realizado por investigadores de la Universidad Médica de Tianjin, descubrieron que nuestras bebidas matutinas favoritas: el café y té, son un maravilloso aliado para proteger la salud cardiovascular y cerebral. El equipo de científicos, dirigidos por Yuan Zhang de la Universidad Médica de Tianjin en China, observaron que aquellos que bebían de 2 a 3 tazas de café junto con la misma cantidad de té todos los días tenían un 32% menos de riesgo de accidente cerebrovascular y un 28% menor riesgo de demencia, en comparación con aquellos que no bebían ninguno. Los hallazgos fueron publicados el pasado 16 de noviembre en PLOS Medicine.
Entre los datos más relevantes del estudio, sin lugar a dudas se encuentra su duración, ya que durante casi 14 años los científicos compararon el consumo de café y té con el riesgo de accidente cerebrovascular y demencia entre una amplia muestra de 366.000 británicos sanos de entre 50 y 74 años. Los hallazgos prueban que existe una asociación positiva entre el consumo de café y té, que en conjunto con hábitos saludables disminuye el riesgo de derrame cerebral o demencia.
Con base en ello varios expertos se han manifestado al respecto, tal es el caso de Connie Diekman, ex presidenta de la Academia de Nutrición y Dietética que revisó los hallazgos y quien señaló: “La gente debe recordar que una asociación no garantiza que ocurra el mismo resultado.” El equipo de estudio chino ofreció la misma cautela.
Los datos sobre los participantes del estudio provienen del Biobanco del Reino Unido, que recopiló información de salud de 22 centros de atención en el Reino Unido. La inscripción, a una edad promedio de 60 años, comenzó entre 2006 y 2010. Los participantes completaron cuestionarios sobre sus hábitos de café y té. Como parte de este estudio de gran tamaño, el equipo rastreo el riesgo de accidente cerebrovascular y demencia hasta 2020.
Algunos datos relevantes sobre el estudio:
Aproximadamente una quinta parte de los participantes no bebió café en absoluto y aproximadamente el 14% no bebió té. El grupo más grande, el 16%, informó beber entre media taza y 1 taza de café al día y aproximadamente 4 tazas de té. Aproximadamente el 14% dijo que bebía una cantidad similar de té pero no café. Finalmente, el 12% dijo que bebía de 2 a 3 tazas de café y té al día. Cabe mencionar que durante el período de seguimiento: 10.053 participantes (2,7%) sufrieron un accidente cerebrovascular y 5.079 (1,4%) desarrollaron demencia.
Dentro de los hallazgos relevantes beber café y té, incluso en cantidades pequeñas se relacionó con un menor riesgo de sufrir ambas afecciones de salud. El riesgo más bajo de accidente cerebrovascular y demencia se observó entre los participantes que tomaron: de 2 a 3 tazas de café al día, de 3 a 5 tazas de té o de 4 a 6 tazas combinadas de ambos.
Si bien se observó un menor riesgo de accidentes cerebrovasculares isquémicos como resultado de un coágulo de sangre o arterias estrechas, no hubo reducción en el riesgo de una forma menos común de accidente cerebrovascular (hemorrágico) que resulta de la rotura de los vasos sanguíneos.
¿Cuáles son los efectos protectores del café y té?
Lo primero que tenemos que decir, es que hoy en día han salido a la luz numerosos estudios que hablan sobre los beneficios medicinales del café y del té. Las referencias con las que se cuenta señalan que la cafeína y la actividad antioxidante que proporcionan plantas de las que provienen el café y el té, son los responsables de sus bondades terapéuticas. Y como era de esperarse, en este nuevo estudio se avaló que estas mismas sustancias, benefician la salud cardiovascular y cerebral. Este hallazgo ciertamente respalda lo que sabemos sobre tantos alimentos vegetales: ofrecen muchos beneficios relacionados con la salud más allá de las vitaminas y minerales que contienen.
Lona Sandon, profesora asociada y directora del programa en nutrición clínica en el Centro Médico de la Universidad de Texas Southwestern en Dallas, estuvo de acuerdo y señaló que el café y el té contienen varios compuestos químicos, no solo cafeína, que tienen beneficios para la salud. Y de acuerdo con sus declaraciones: “Estos efectos podrían influir en el riesgo de demencia o accidente cerebrovascular. Hay muchas posibilidades de cómo estos químicos podrían funcionar en el cuerpo, desde antioxidantes, antiinflamatorios, aumentar el flujo sanguíneo, proteger los vasos sanguíneos del daño y más.”
Además cabe mencionar que ninguno de los especialistas estaba particularmente preocupado por la cantidad de café o té en cuestión. Sandon señaló que de 4 a 6 tazas es bastante común en muchos países, mientras que otros expertos señalaron que las pautas actuales indican que de 3 a 5 tazas (de 8 onzas) de café al día parecen ser seguras para la mayoría de los adultos.
Sin lugar a dudas un punto más a favor para los amantes del té y café, si bien es un hecho que cada bebida se asocia con diferentes beneficios; al final termina siendo cuestión de gustos. El punto ahora, debería de ser si los no bebedores recurrentes de estas dos clásicas bebidas cotidianas deberían empezar por basarse en estos hallazgos y así beneficiar su salud a otro nivel. Finalmente el consumo de té y café, se asocia con una larga lista de bondades entre las que se destacan sus beneficios para promover la pérdida de peso, quemar grasa, hidratar y depurar al organismo, beneficiar la digestión, mejorar el rendimiento físico y mental; entre muchas otras.
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