Despídete del café: estudio revela sus efectos en personas mayores de 60 años
Aunque el café es una de las bebidas más populares del mundo, beber 3 tazas al día podría tener efectos negativos en la salud cerebral
El café es una de las bebidas más populares del mundo, por lo que forma parte de la dieta de millones de personas. Según un estudio, el consumo de más de tres tazas de café al día, se relaciona con un deterioro más rápido de las capacidades cognitivas en personas mayores de 60 años.
Los granos de café contienen una variedad de compuestos bioactivos, entre ellos cafeína, ácido clorogénico y pequeñas cantidades de vitaminas y minerales.
Según en estudios observacionales y epidemiológicos, “el consumo de café y té tiene efectos beneficiosos sobre los accidentes cerebrovasculares, la insuficiencia cardíaca, el cáncer, la diabetes y la enfermedad de Parkinson”, indica Medscape .
La investigadora Kelsey R. Sewell, del Advent Health Research Institute, asegura a la publicación médica Medscape, que “como dice el refrán, los excesos son malos. El consumo moderado de café está bien, pero probablemente no se recomienda excederse”.
Sewell publicó un estudio que evidencia que adultos mayores sin deterioro cognitivo con “un mayor consumo de café estaba asociado con un deterioro cognitivo más lento y una acumulación más lenta de beta-amiloide en el cerebro”.
Efectos del café en personas mayores de 60 años
Se trata de una investigación realizada en el Reino Unido con un total de 8.451 personas mayores de 60 años, de las cuales el 60% de ellas mujeres.
Uno de los parámetros evaluado fue la inteligencia flexible, que es la que procesa la información y la capacidad de resolver problemas, llegando a la conclusión de que los que bebieron poco o nada de café disminuyó un 8,83% menos en comparación con aquellos que sí bebieron mucho café.
El periodo de medición fue de un año, en donde observaron los efectos del café en el organismo y de consumirlo en cantidades determinadas; así como las reacciones de acuerdo a la edad, en el caso de una investigación realizada en personas mayores.
Sewell explica que las personas “con un alto consumo de café mostraron la disminución más pronunciada en la inteligencia fluida a lo largo del seguimiento, en comparación con aquellos con un consumo moderado de café y aquellos que nunca consumieron café”.
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