Fresas frescas por más tiempo con este truco
Aprende a desinfectar las fresas con la termoterapia
Un experto explica cómo la termoterapia ayuda a eliminar los gérmenes de la fruta. Crédito: Shutterstock
Mantener las fresas libres de gérmenes y microorganismos es una forma de preservar su frescura y evitar un deterioro acelerado de la fruta. La termoterapia es una técnica sencilla que ayuda a preservar las condiciones para alargar la vida útil de las fresas.
El experto en gastronomía científica Heinz Wuth, explica en su cuenta de Instagram dedicada a consejos de comida que una de las técnicas más efectivas y sencilla para eliminar las bacterias y microorganismos de las fresas es la termoterapia.
Este sencillo método consientes en meter las fresas en agua caliente, para eliminar microorganismos con la temperatura.
Para demostrar la efectividad de la técnica, Wuth tomó dos porciones de fresas. Unas las lavó con agua y las guardó en el refrigerador en un recipiente tapado con un papel film; mientras que la otra porción de fresas las sumergió en agua caliente por 30 segundos, enjuagó con agua fría y luego las llevó al refrigerio al igual que el primer grupo.
Pasado cuatro días las fresas que se lavaron solo con agua se llenaron de hongos, mientras las que se desinfectaron con termoterapia se mantuvieron fresas y sin moho por siete días.
Qué ocurre en la fruta con la termoterapia
Con la termoterapia se logra eliminar los restos de pesticidas y los microorganismos patógenos, dos factores que pueden alargar la vida útil de la fruta.
El agua caliente elimina los hongos y bacterias que están en la superficie de la fruta, que aceleran el proceso de la putrefacción de la fruta. Además, el calor elimina los residuos de los compuestos químicos utilizados en la agricultura.
Paso a paso para desinfectar las fresas con termoterapia
1.- En un recipiente, agregue agua caliente limpia a una temperatura entre 50-60 °C. Para estos casos lo más seguro es usar un termómetro de cocina o es meter el dedo limpio durante más de un segundo sin quemarte. Si no tienes termómetro, usa una parte de agua fría y luego añades el agua hirviendo.
2.- Agrega las fresas en un colador sumérgelas en el agua caliente durante 30 segundos. El uso del colador ayuda a un mejor manejo de la fruta tras introducirlas en el agua caliente, al permitir sacarlas con facilidad
3.- Retira las fresas del agua caliente, y corte la temperatura, introduciéndolas en un chorro de agua fría o en un tazón con agua fría y hielo.
4.- Escurra las fresas y pase a un paño de cocina o papel absorbente. Asegúrese de secar bien la fruta para evitar que la humedad afecte la textura de las fresas.
5.- Reserve en un recipiente con tapa y lleve al refrigerador.
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