Ataques de Rusia amenazan la seguridad nuclear de Ucrania
Rusia emplea una táctica nueva y peligrosa: misiles contra estaciones transformadoras de centrales nucleares ucranianas
Objetivo de los rusos: provocar apagones en Ucrania Crédito: Wikimedia Commons
Aunque el sistema energético de Ucrania ya está gravemente dañado, el Ejército ruso ha intensificado el bombardeo de la infraestructura energética del país.
Rusia bombardeó la noche del 8 de noviembre las centrales transformadoras de las plantas nucleares de Jmelnitski y Rivne. El ministro de Asuntos Exteriores, Andrii Sibiha, describió los ataques de meticulosamente planeados.
Ambas centrales nucleares se vieron obligadas a reducir su generación de electricidad, según anunció el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en X.
Reactores nucleares no pueden desconectarse
Volodimir Omelchenko, experto en energía del Centro de Investigación Razumkov, en Kiev, afirmó que “el objetivo (de Rusia) no es sólo interrumpir el suministro eléctrico en las regiones afectadas, sino también destruir la energía nuclear, la base del sistema energético ucraniano.
Mientras las nueve centrales nucleares ucranianas estén operativas, nuestro sistema energético es intocable y seguirá funcionando. Por eso, los rusos han dado el paso final y están llevando a cabo ataques terroristas híbridos contra centrales nucleares”.
Omelchenko explicó a DW que si atacan una estación transformadora, la central nuclear no puede suministrar electricidad a la red y se activa inmediatamente el servicio de emergencia del reactor. Esto supone un riesgo, porque es imposible que se produzca un apagado rápido.
Provocar apagones en Ucrania
Como subrayó Omelchenko, los protocolos de seguridad no contemplan ataques contra infraestructuras como una central nuclear.
Rusia ya inhabilitó la estación transformadora de una central nuclear ucraniana en noviembre de 2022, lo que provocó un breve apagón. Y en la actualidad, el objetivo de los rusos no ha cambiado: provocar apagones en Ucrania y lograr la fragmentación de la red eléctrica en islas energéticas aisladas.
Olha Koscharna, experta nuclear y exmiembro del consejo de la Agencia Estatal de Regulación Nuclear, dijo en entrevista con DW que la situación se ha visto agravada por la destrucción generalizada de centrales eléctricas, estaciones transformadoras y sistemas de transmisión.
Riesgo de apagones prolongados
“A diferencia de 2022, cuando la red eléctrica podía restablecerse en catorce horas gracias a una mayor capacidad de generación (de energía) y una red extensa, la situación ahora es muy diferente”, afirmó Koscharna, quien añadió que ”casi toda la generación de energía al este del río Dniéper ha sido destruida”, además de algunas centrales térmicas.
Rusia ataca allí donde más daño puede infligir a Ucrania, concluyó Viktoria Wojzyzka, exmiembro de la Comisión Parlamentaria de Energía y Seguridad Nuclear y miembro del Consejo de Administración del centro de estudios WE BUILD UKRAINE (Reconstruimos Ucrania).
“Esto es patente en los ataques a la central térmica de Tripilia, cuyo objetivo era cortar el suministro eléctrico a Kiev y a la región durante las horas punta de la mañana y la tarde. Y también en los ataques a la estación transformadora de Kiev, sin la cual no se puede garantizar el suministro eléctrico de la central nuclear de Rivne, la principal fuente de energía de la ciudad”. El invierno de 2025/26 será mucho más difícil para Kiev en cuanto al suministro de electricidad y calefacción.
Ucrania hace un llamamiento a todos los países, en particular a China e India, para que insten a Rusia a cesar sus temerarios ataques contra las centrales nucleares. “Es necesaria la presión internacional para obligar a Moscú a poner fin a su chantaje nuclear”, declaró recientemente el ministro Sibiha.
Ucrania también solicitó una reunión de emergencia del Consejo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) para abordar los “riesgos” que suponen los ataques rusos contra la infraestructura nuclear ucraniana.
Consecuencias para todo el continente europeo
El director general del OIEA, Rafael Grossi, emitió una declaración más cautelosa: “Insto nuevamente al Ejército a que actúen con la máxima moderación para salvaguardar la seguridad nuclear y prevenir accidentes con graves consecuencias radiológicas”.
“Debemos preservar la energía nuclear a toda costa, reforzar las defensas aéreas sobre las estaciones transformadoras clave, que suministran energía a las centrales nucleares, y pedir a nuestros socios que proporcionen sistemas de defensa aérea, como el Patriot, para proteger estas estaciones transformadoras”, afirmó Omelchenko, quien añadió que “todo esto es necesario no sólo para Ucrania, sino para toda Europa, porque un accidente nuclear tendría repercusiones en todo el continente”.
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