Los químicos del protector solar se absorben en la sangre
Los efectos de esas sustancias todavía se desconocen
El cáncer de piel es el tipo de cáncer más común en Estados Unidos, de acuerdo con datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Afecta particularmente a hombres blancos en una tasa que se ha mantenido a la alza de manera constante desde 1999.
Con esta información, usar cremas que protejan de los rayos solares es ya una necesidad en cualquier parte del país, pero una investigación reciente descubrió que los químicos del protector solar se absorben en la sangre a través de la piel.
La investigación
La Food and Drugs Administration (FDA) realizó varias pruebas de laboratorio en 24 adultos sanos a quienes voluntariamente se les aplicó protector solar cuatros veces al día durante cuatro días. Los participantes permanecieron en un laboratorio durante siete días, sin que en realidad les diera la luz solar.
Lo que los investigadores encontraron fue que la sangre de los sujetos presentó niveles altos de cuatro químicos que son ingredientes comunes de los protectores solares: avobenzona, oxibenzona, octocrileno y ecamsule. Todos rebasaron los 0.5 nanogramos por mililitro, el nivel establecido por la FDA en 2016. La misma agencia señala que cualquier sustancia que se absorba en la sangre por encima de ese nivel, debe someterse a estudios adicionales de seguridad.
¿Hay que dejar de usar protector solar?
Los autores del estudio, publicado en la revista JAMA, advierten que no hay que dejar de usar protector solar a pesar los resultados de su investigación, pues el riesgo de contraer melanoma supera, por mucho, el daño que hasta ahora se conoce sobre esos químicos.
Sin embargo, los protectores solares y sus ingredientes deberán someterse a pruebas de seguridad para saber con exactitud qué efectos provoca en la salud, su absorción a través del torrente sanguíneo, y si representa algún riesgo potencial de desarrollar cáncer o de afectar la salud reproductiva.
Además, el estudio se realizó a puerta cerrada, por lo que la exposición al sol y otros factores como la edad, el tipo de piel y la cantidad de crema que se aplica, podrían cambiar la forma en que estos químicos se absorben.