¿Por qué es difícil resistirse a un pedazo pastel, donas o chocolate?
Podrías tener una peligrosa adicción al azúcar
Te preguntas por qué cuesta tanto trabajo decir que no cuando te ofrecen un antojo dulce como galleta, pan, chocolate o helado. Probablemente culpes a la falta de voluntad para poder rechazar estos alimentos que por lo general aportan pocos nutrientes y van perjudicando no solo tu peso, sino tu salud. La realidad es que todo tiene una causa, y debes identificar por qué tu cuerpo está pidiendo azúcar, uno de esos motivos podría ser adicción al azúcar.
Ayunos, dieta o estrés
El organismo puede sentir la necesidad de dulce cuando se está en una dieta severa o se está durante muchas horas sin comer y sometido a situaciones de estrés.
Periodos de ayunos prolongados que hacen que el nivel de azúcar en sangre baje demasiado, un nivel alto de estrés en el cual el cerebro gasta más glucosa, dietas restrictivas o la unión de estos tres factores”, explica a CuídatePlus Claudia Guerrico, nutricionista de la unidad de Psicología y Medicina de la Salud, PsicoActúa, del Hospital Vithas Medimar Internacional (Alicante).
Adicción al azúcar
El cuerpo necesita glucosa, es la fuente de energía para funcionar adecuadamente, y pese a que el azúcar no aporta ningún nutriente, está compuesto por glucosa y fructuosa.
Cuando se le ofrecen al cuerpo carbohidratos simples como los que contienen los dulces, bebidas azucaradas, galletas y “comida chatarra dulce”, se conduce a un aumento más rápido del azúcar en la sangre y acostumbramos al cuerpo a obtener energía de forma fácil y rápida (y no saludable), el organismo deja de trabajar de una manera adecuada por ello y es allí donde se genera una especie de adicción.
Hay quienes se atreven a comparar a la adicción al azúcar como sucede con sustancias prohibidas como la cocaína, la persona comienza a sentirse mejor, más animada, sin embargo, es un estímulo veloz que al pasar nos deja la sensación de desánimo, cansados, irritables, con pocas ganas de movernos o de pensar, por lo que sentimos necesidad de más azúcar. Lo que nos da una sobredosis de glucosa que a la larga tiene efectos negativos para la salud como sobrepeso, diabetes, insuficiencia renal y enfermedades cardiovasculares.
Qué sucede a nuestro cerebro
Desde el punto de vista de la neurociencia “cuando comemos alimentos dulces, el sistema de recompensa del cerebro, llamado sistema de dopamina mesolímbico, se activa… cuando se activa el sistema de recompensas, refuerza los comportamientos, lo que hace que sea más probable que volvamos a realizar estas acciones”, señala Amy Reichelt, investigadora asociada de BrainsCAN, Western University .
Comer regularmente alimentos ricos en azúcar podría aumentar los antojos, creando un círculo vicioso de querer más y más de estos alimentos.
El área del cerebro afectada por las dietas altas en azúcar es el hipocampo, un centro clave de memoria.
La investigación muestra que las ratas que consumen dietas altas en azúcar eran menos capaces de recordar si habían visto objetos anteriormente en lugares específicos antes.
Los cambios inducidos por el azúcar en el hipocampo fueron tanto una reducción de las neuronas recién nacidas, que son vitales para codificar los recuerdos, como un aumento de los químicos relacionados con la inflamación.
Señales de adicción al azúcar
- Hay un consumo compulsivo diario de productos azucarados.
- Planificamos la compra de dulces.
- Sustituimos alimentos más sanos por dulces, como zumos en lugar de frutas.
¿Qué debemos hacer?
Practicar la vía más lenta de obtener energía a través del consumo de carbohidratos complejos “en los cuales la glucosa se va liberando de forma lenta”, señala la nutricionista Guerrico.
Elegir alimentos para el desayuno enteros y sin procesar, como avena, trigo, arroz, pasta, patatas y panes, si son integrales mejor, porque los azúcares se liberan de manera más lenta aún.
Los carbohidratos saludables, como los granos enteros, las frutas y las verduras, son una parte importante de un plan de alimentación saludable porque pueden proporcionar energía y nutrientes, como vitaminas, minerales y fibra. La fibra puede ayudarle a prevenir el estreñimiento, bajar los niveles de colesterol y controlar su peso.
Lo más importante, es que si usted o algún miembro de su familia tiene un consumo adictivo al azúcar, acuda con el médico, ya que la salud puede verse gravemente afectada.