Qué sucede en tu cuerpo si comes mantequilla de maní todos los días
La mantequilla de maní puede ayudarte a perder peso o aumentarlo
Las grasas buenas de la mantequilla de maní reducen las tasas de mortalidad cardiovascular Crédito: Shutterstock
La mantequilla de maní se ha convertido en un gusto no culposo que muchos disfrutamos diario reconfortados por su textura cremosa, sabor dulce y a sabiendas de que es rico en grasas buenas y nos aporta proteínas, fibra, vitaminas y minerales.
La mantequilla de maní tiene muchos pros y pocos contras, los cuales puedes sortear con un consumo adecuado.
¿Qué pasa si comes mantequilla de maní diario?
Puede mejorar tu estado de ánimo
El consumo de mantequilla de mani puede mejorar tu ánimo ya que los cacahuates contienen beta-sitosterol un fitonutriente que puede mejorar los síntomas de ansiedad y depresión debido a su efecto sobre el neurotransmisor GABA.
Obtienes grasas que tu cuerpo necesita
La mantequilla de cacahuate está llena de grasas no saturadas que proporcionan grasas esenciales que tu cuerpo necesita pero no puede producir por sí mismo.
Tienes energía
Gracias a su alto contenido calórico, la mantequilla de maní es una manera fácil de aumentar la ingesta de calorías y grasas saludables que pueden darte el impulso de energía que necesitas. No excedas las porciones (2 cucharadas).
Puedes reducir el colesterol malo
La Asociación Americana del Corazón señala que las grasas insaturadas (poli y mono):
- Reducen las tasas de mortalidad cardiovascular y por cualquier causa
- Reducen el colesterol malo y el nivel de triglicéridos
Puedes perder peso
Agregar mantequilla de maní a un pan tostado, batido, fruta o sándwich puede brindarte una mayor saciedad gracias a las grasas saludables y la fibra que aporta. Te puedes sentir lleno por más tiempo y reduces la tentación de comer bocadillos.
Otra razón es que el alto contenido de proteínas y grasas monoinsaturadas en el maní puede aumentar la quema de calorías.
Control de azúcar en sangre
El maní puede ayudar a controlar el azúcar en la sangre y la inflamación debido a los nutrientes que contienen, como ácidos grasos insaturados, fibra, vitamina E y magnesio.
Puedes reducir riesgo de cáncer de mama
Comer mantequilla de maní, especialmente desde una edad temprana, puede reducir el riesgo de enfermedad mamaria benigna (BBD), que aumenta el riesgo de cáncer de mama, publica Medical News Today basándose en un estudio publicado en la revista Breast Cancer Research and Treatment.
Prevención de Alzheimer
Los cacahuates contienen altos niveles de niacina y son una buena fuente de vitamina E, dos nutrientes que protegen contra el deterioro cognitivo relacionado con la edad.
Puedes mejorar tu piel
La mantequilla de maní es rica en vitamina E, un antioxidante que puede ayudar a proteger su piel de los efectos dañinos de los radicales libres. También las grasas monoinsaturadas del maní ayudarán a mantener tu piel flexible y naturalmente radiante.
Puedes mejorar tu presión arterial
El magnesio y potasio, dos minerales en el maní que ayudan a controlar la presión arterial y equilibrar el sodio. Evita adquirir mantequillas con alto contenido en sodio.
Aumento de peso si no controlas tus porciones
La mantequilla de maní es alta en calorías, dos cucharadas tienen alrededor de 180 calorías, por lo que si excedes diariamente las porciones y no equilibras tu alimentación, podrías registrar un aumento de peso.
Podrías inflamarte
Los cacahuetes son ricos en grasas omega-6 los cuales pueden causar inflamación. Equilibra con alimentos que contengan omega-3 como pescados grasos, semillas de chía o semillas de linaza.
¿Te preocupa que contiene algo de grasa saturada?
El 80% de sus grasas son no saturadas. Una porción (2 cucharadas) tiene 3,3 gramos de grasa saturada y 12,3 gramos de grasa no saturada. “Eso lo pone a la altura del aceite de oliva en términos de la proporción de grasas insaturadas y saturadas”, explica Walter Willett profesor de nutrición en la Universidad de Harvard.
Recomendaciones al comprar
Evita mantequillas de maní procesadas que usaban aceites vegetales hidrogenados como emulsionantes para una mayor consistencia.
Evita aquellas mantequillas con grandes cantidades de azúcar y sodio agregado.
Puedes preparar tu mantequilla en casa, fácil, 100% natural y más barata
